La suerte de tener un hogar

El Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid, gobernado por IU, sorteó ayer, mediante varios bombos solicitados a la ONCE, una de las mayores ofertas de vivienda protegida que se recuerdan en la región. En total, 485 pisos, la mitad en régimen de venta y la mitad en alquiler, fueron concedidos a algunas de las 3.613 familias solicitantes.

La expectación levantada por el concurso queda ilustrada con un hecho: 5.000 de los 42.000 habitantes de la localidad abarrotaron en la mañana de ayer el polideportivo Cerro del Telégrafo para presenciar el concurso en directo. Los afortunados protagonizaron escenas de alegría, euforia y emoción al conocer que habían sido agraciados con alguna vivienda.

"Algunos corrían, otros hacían una piña unos encima de los otros y otros lloraban. La verdad es que ha sido muy emocionante", explicó ayer el concejal de Juventud de Rivas, Pedro del Cura. Éste se mostró muy satisfecho por el funcionamiento del concurso y la forma en que ha sido seguido por la población.

Alejandro Álvarez, un vecino de 21 años que alterna sus estudios de técnico superior en Actividades Físicas y Deportivas con un trabajo en un hipermercado, fue uno de los más afortunados. "Me ha tocado un piso de más de 110 metros cuadrados. Me han dicho que nos lo darán en año y medio y que me costará unos 100.000 euros. Llevo cuatro años con mi novia y ahora ya nos podemos plantear ir a vivir juntos", explicó, entusiasmado, ayer por la tarde.

Las 485 viviendas fueron divididas en lotes para "discriminar positivamente los colectivos que queríamos favorecer", explicó Del Cura. Éstos han sido los de renta reducida, los más jóvenes o mayores, los minusválidos y las familias monoparentales. Un 80% de las solicitudes fueron hechas por menores de 35 años.