Dos de cada tres votantes letones dijeron 'sí' a la UE

Dos tercios de los letones que votaron en el referéndum del sábado pasado aprobaron la integración de su país en la Unión Europea, según los datos definitivos del recuento, difundidos ayer. Con el 100% de los votos escrutados, la Comisión Electoral Central anunció que un 67% de los letones que acudieron a las urnas dijo sí a la UE y un 32,3% rechazó la integración.

La participación fue del 72,53% de un electorado de 1,38 millones de personas, porcentaje más alto que el alcanzado en los comicios parlamentarios de octubre de 2002. En la capital del país, Riga, se pronunciaron a favor de la entrada en la UE un 59,1% de los votantes.

El referéndum de Letonia culmina el ciclo de plebiscitos en los 10 países europeos invitados a unirse a los actuales 15 miembros de la UE en mayo de 2004. Junto a Letonia, respaldaron la adhesión Malta, Eslovenia, Hungría, Lituania, Eslovaquia, Polonia, la República Checa, Estonia y Chipre.

Pese a la amplia victoria del sí, el plebiscito letón se vio marcado por las sombras que oscurecen el acceso del país báltico a la UE. Por una parte, casi medio millón de habitantes de Letonia fueron excluidos del referéndum, al no disponer de la ciudadanía. Unos 349.000 rusos, 65.000 bielorrusos, 50.000 ucranios y 17.000 polacos están desprovistos de la nacionalidad letona y de cualquier otra.

El menor apoyo en el referéndum se dio precisamente en Daugavpils, ciudad donde un 85% de la población es de origen ruso. En esta urbe del sureste de Letonia, la segunda mayor del país tras Riga, un 67,3% de los votantes se declararon en contra de la adhesión.

Por otro lado, la crisis política que se fraguaba desde hace semanas en el seno del Gobierno de coalición cuatripartito, acallada durante la campaña por un pacto de silencio entre los implicados, estalló con toda su virulencia al terminar la votación. Una de las cuatro formaciones coaligadas, el Primer Partido, acusó al primer ministro letón, Einar Repse, de autoritarismo y pidió su dimisión; el jefe de Gobierno, por su parte, dio por concluida la alianza en el poder.