Los políticos alertan del descrédito de la democracia por la corrupción

Los tres políticos y el juez reunidos ayer en el seminario Corrupción: causas, efectos y tratamientos jurídicos de la UIMP rechazaron que exista una corrupción generalizada en la clase política española y advirtieron del descrédito de la democracia por la extensión del tópico que los identifica con esa práctica delictiva. Los ponentes consideraron un problema muy grave la corrupción urbanística, a excepción del representante del PP.

El diputado popular por Ciudad Real Enrique Belda afirmó que "no hay corrupción" en comunidades con mayoría absoluta como la castellano-manchega o la valenciana y ni de forma generalizada en "el ámbito político y estatal". Hay "corruptelas", "episodios", apuntó. "No es como en los años 90", en los que quizá algún medio desafecto al PSOE hinchó esa sensación de corrupción, añadió. Negó también la existencia de una especial preocupación social por la corrupción urbanística, que no es generalizada. En el seminario, que arrancó el lunes y finaliza hoy, se ha hecho hincapié en la relación entre la corrupción urbanística, el blanqueo de dinero y la subida del precio de la vivienda.

La diputada de IU, Presentación Urán, incidió en la corrupción ética, en la peligrosa implantación de la especulación (citó Marbella y Madrid) y en la "clara confusión entre lo público y lo privado" que padece el PP. Pidió aplicar la ley de incompatibilidades y destinar más recursos públicos a la lucha contra la corrupción. La vicepresidenta del Bloc, Pepa Chesa, puso el énfasis en la "asignatura pendiente" de la financiación de los partidos, que ha generado múltiples casos de corrupción, además de resaltar la extensión de la corrupción urbanística en el litoral valenciano y el necesario consenso para potenciar la fiscalía anticorrupción. El presidente de Juristas Demócratas y ex diputado del PSPV, Juan Antonio Llorente, dijo no tener una visión optimista de la corrupción política, señaló que se trata de un problema social, recordó que España aún no ha ratificado los convenios penales y civiles contra la corrupción, rechazó la descalificación generalizada de la política y abundó en que la construcción, motor de la economía, es foco de corrupción. El moderador de la mesa y fiscal del Supremo, Antonio Verhcer, criticó la falta de independencia del fiscal general del Estado que ni el PSOE ni el PP han solucionado.