Beneficios bien ganados

Los inversores a corto plazo no se han dejado impresionar por la facilidad con que los índices alcanzaron los últimos máximos anuales y han procedido a retirar sus beneficios, en tanto el mercado demuestra que es capaz de mantenerse en esos niveles.

En conjunto, esta jornada ha resultado bastante positiva, con un equilibrio más que aceptable entre papel y dinero y un deterioro discreto de los precios. Lo único que se ha echado en falta ha sido cierta continuidad en el proceso comprador de las últimas sesiones, algo que justificaba la velocidad con que se tomaron beneficios. La contratación en el Mercado Continuo descendió hasta los 1.944,10 millones de euros, con cerca de 700 millones en operaciones institucionales.

Los nuevos datos económicos publicados en Estados Unidos, el índice de actividad del sector servicios de agosto y los pedidos a fábrica del mes de julio, han superado ampliamente las expectativas de los analistas, pero en el mercado los inversores continúan comportándose como quien recoge lo que ha sembrado y a media sesión el índice Dow Jones apenas ganaba el 0,26%. La actividad del sector servicios se mantuvo en agosto y los pedidos a fábrica aumentaron el 1,6%, pero todo ello sin generar mano de obra, ya que la revisión del índice de productividad del segundo trimestre, con un incremento del 6,8%, muestra que la recuperación de la economía se realiza con bajas tasas de empleo.

El mercado europeo no tuvo tiempo de entrar a valorar esos datos, ya que desde primeras horas de la mañana se imponían las retiradas de beneficios y las nuevas tomas de posiciones apenas bastaban para tapar agujeros.

El Ibex 35 cedió el 0,36% y se mantiene por encima de los 7.200 puntos, al tiempo que el índice general de la Bolsa de Madrid bajó el 0,35%. El conjunto de los mercados europeos centró sus pérdidas en esos niveles, con el 0,35% en París y el 0,31% en Londres, mientras que Francfort se dejaba arrastrar por el pequeño avance de Nueva York y ganaba el 0,33% antes del cierre.