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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Cinco a Vilcabamba

Colin Thubron combina viaje y ficción en 'Hacia la última ciudad', el relato de una dramática excursión a la capital perdida de los incas. Lo que comienza como turismo aventurero termina convirtiéndose en un trayecto iniciático para los cinco protagonistas de esta historia coral.

Jacinto Antón

Aparece por fin en España una novela del gran escritor de literatura de viajes Colin Thubron (El corazón perdido de Asia, Entre rusos...). Es Hacia la última ciudad, la más reciente (2002) de la media docena que ha escrito y la única hasta ahora en la que combina su pasión viajera con su faceta de narrador de ficción, pues las anteriores se desarrollaban en general en espacios cerrados e incluso claustrofóbicos (A cruel madness, de 1984, en un sanatorio mental; Falling, de 1989, en una prisión). Muy al contrario, Hacia la última ciudad, que ha sido finalista del prestigioso Premio Booker, transcurre durante un viaje, un duro trekking en los grandiosos parajes del Camino del Inca, en Perú.

HACIA LA ÚLTIMA CIUDAD

Colin Thubron

Traducción de Juan Gabriel Vásquez

El Aleph. Barcelona, 2003

190 páginas. 15 euros

En ese escenario, Thubron sitúa una historia coral con cinco protagonistas -una pareja inglesa, otra belga y un seminarista español- que recorren los parajes del corazón de los Andes camino de la legendaria Vilcabamba, la capital perdida del último reino inca. El viaje, inicialmente una de esas habituales experiencias de turismo de aventura tan en boga, se revela pronto como mucho más: un trayecto iniciático en el que cada personaje, al que impulsa una razón concreta, se enfrenta a sus propios dilemas y demonios interiores a la vez que se relaciona complejamente con los demás miembros del grupo.

En esta especie de intensa y apasionante versión adulta de El Mago de Oz -que incluye incluso algunas exactas consideraciones sobre valor y cobardía-, el propio Thubron parece ofrecer una proyección tremendamente autocrítica de sí mismo en Robert, el escritor en crisis que para reactivar su talento se apropia sin misericordia de fragmentos de paisajes y vidas -incluso del triste espectáculo de una momia inca expoliada-. Completan el microcosmos de la expedición el belga Robert, fracasado genio de la arquitectura devenido cínico hedonista, su bella y liviana joven esposa Josiane, cuyo escalofriante destino preludian nubes de mariposas anaranjadas y azules en una de las escenas más fascinantes de la novela; el seminarista extremeño Francisco, atormentado por una culpa que remonta a Pizarro (quizá el personaje más endeble, aunque esto puede ser un prejuicio inconsciente ante el hecho de que salga de la pluma de un británico), y, la mujer de Robert, Camila, que se revela como la más fuerte moralmente del quinteto.

En las expertas manos del viajero Thubron, el paisaje y las gentes que los personajes encuentran en el camino -un camino que el propio autor recorrió previamente: "Lo más duro que he hecho", afirma- aparecen descritos mucho más someramente que en los libros de viajes, pero con una intensidad sobrecogedora. El escenario cataliza y amplifica los conflictos de los cinco protagonistas envolviéndolos en una atmósfera misteriosa con un extraño componente sagrado y de sacrificio. Varias situaciones dramáticas y, al final, una trágica, potencian también el que los personajes se desnuden psicológicamente en esta malhadada excursión. El lector traza como ellos la geometría anímica de sus afinidades y enemistades durante un relato en el que Thubron cartografía con precisión entomológica las complejidades del corazón humano. Novela itinerante, dotada de profundas observaciones sobre el paisaje y los personajes, con un fuerte trasfondo histórico (el fin del imperio inca y sus enigmas), insuflada de hálito poético y teñida de una mirada sombría, Hacia la última ciudad es la magnífica novela que cabía esperar del autor de En Siberia.

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Sobre la firma

Jacinto Antón
Redactor de Cultura, colabora con la Cadena Ser y es autor de dos libros que reúnen sus crónicas. Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona y en Interpretación por el Institut del Teatre, trabajó en el Teatre Lliure. Primer Premio Nacional de Periodismo Cultural, protagonizó la serie de documentales de TVE 'El reportero de la historia'.

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