Zapatero convoca a los barones del norte
El líder socialista continúa con la tarea de aunar al PSOE en torno a una misma idea de España
La organización del Estado y las tensiones autonómicas llevan camino de convertirse en asunto central de las elecciones catalanas del próximo otoño y, sobre todo, de las generales de marzo de 2004. En Cataluña, el candidato socialista, Pasqual Maragall, presentará un proyecto de reforma del Estatuto que, sin duda, avirará el debate. Y la propuesta para Euskadi del lehendakari, Juan José Ibarretxe, obligará a las fuerzas políticas a tomar posición y reaccionar. José Luis Rodríguez Zapatero ha cogido el toro por los cuernos y trata de conseguir en el PSOE una síntesis de posiciones que se convierta en verdadero proyecto común. Los socialistas quieren renovar la idea de la "España plural" que reflejó hace 25 años la Constitución.
Rodríguez Ibarra: "Creo que hemos dado el paso definitivo para estar unidos"
El líder socialista cree que ha avanzado un buen trecho al conseguir el acuerdo de los barones veteranos del PSOE -Manuel Chaves (Andalucía), José Bono (Castilla-La Mancha) y Juan Carlos Rodríguez Ibarra (Extremadura)- con el líder del PSC, Pasqual Maragall, en una reunión celebrada el pasado 22 de julio en Madrid. Ahora continúa la tarea con otro encuentro el próximo 30 de agosto en Cantabria, que ya se denomina "cumbre del norte", en la que estará el resto de los barones: Aragón, Cantabria, Galicia, Asturias, País Vasco, Navarra, Cataluña, Rioja y Castilla y León. Todos los líderes regionales juntos se verán las caras el 3 de septiembre, cuando Zapatero convoque el Consejo Territorial. En esa reunión habrá ya un documento, que tendrá que aprobar el partido en un comité federal, el 5 de septiembre. Pero antes de las generales los socialistas tienen que afrontar las elecciones madrileñas, en octubre, y las catalanas, en noviembre. El líder socialista consideró imprescindible que el candidato a la presidencia de la Generalitat, Maragall, confrontara su punto de vista con el resto de barones, singularmente los del sur. Lo hizo y hubo acuerdo. No parece que vayan a existir problemas con los barones del norte, en cuya reunión participará por Cataluña el primer secretario del PSC, José Montilla.
Las líneas generales ya están en un documento redactado por Zapatero, con el visto bueno de Maragall, Chaves, Bono y Rodríguez Ibarra. "Es importante el acuerdo y ahora se espera que también lo suscriba el resto, pero lo relevante es que Maragall dijera a Ibarra que le espera en Cataluña para hacer campaña", señala un colaborador de Zapatero. No hace mucho, Ibarra comentó que habitualmente se le excluye de las campañas catalanas. Quizá por eso a Zapatero le parece "muy relevante" esa circunstancia.
El documento suscrito por los barones del sur y que se someterá a la consideración del resto habla específicamente de Cataluña. "El PSOE tiene un proyecto común para la España plural, que en Cataluña es el PSC, y todos los socialistas vamos a apoyarlo en las próximas elecciones (...) Un Gobierno de Maragall supondrá una Cataluña más fuerte, más social y mejor integrada, desde su identidad, en España y en Europa".
La "comunión" entre los barones socialistas sobre la España autonómica se articula en torno a tres elementos: reforma de la Constitución, pero sólo para convertir el Senado en una Cámara de representación, participación e integración de las comunidades en el Estado; nuevos mecanismos de participación de las comunidades en la construcción europea y creación de nuevos instrumentos de cooperación entre las comunidades y el Estado, especialmente con la creación de la Conferencia de Presidentes.
Se trata de principios generales, aunque cada comunidad autónoma podrá proponer la reforma de su Estatuto, como se proponen hacer en Cataluña tanto el PSC como CiU, dentro del marco constitucional. En cambio, los socialistas vascos excluyen de momento una reforma estatutaria. Mientras en el interior del PSOE existe satisfacción, porque se considera que se está en vías de solucionar un problema, al presidente del Gobierno, José María Aznar, se le antoja que Zapatero, con sus "ocurrencias", quiere poner España "patas arriba". Nada de "ocurrencias", replica la portavoz del comité electoral del PSOE, Carme Chacón, sino la constancia de que urge la cooperación entre el Gobierno y las comunidades autónomas.
Aznar ha constatado en su reciente ronda de reuniones con los presidentes autonómicos que los socialistas (Vicente Álvarez Areces, de Asturias; Marcelino Iglesias, de Aragón; Bono e Ibarra) ponían mucho interés en pedirle "tranquilidad" sobre la cohesión de España. También defendieron ante Aznar a Maragall y a O
dón Elorza, el alcalde de San Sebastián. "Creo que hemos dado el paso definitivo para estar unidos", confía Ibarra.
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