Actividad bajo mínimo

La sesión del viernes en la Bolsa española se saldó con moderadas subidas en los principales indicadores. La falta de referencias económicas en los mercados fue la nota destacada, lo que permitió pequeños tanteos compradores en valores selectivos.

Desde primeras horas de contratación, el dinero hizo su aparición, aunque las subidas vienen más producidas por la escasez de papel que por la fortaleza de las compras. Las cotizaciones se mueven sin fuerza, tal y como lo demuestran las cortas cifras de negocio, y el juego a muy corto plazo manda en las bolsas.

El mes de agosto se ha presentado demasiado tranquilo en las mesas de operaciones, pues no se esperan grandes cambios en los próximos días. Datos de inflación en Europa y Estados Unidos serán citas claves en la semana que entra, como también lo será la reunión de la Reserva Federal el próximo martes. De todas formas, los analistas no piensan que la situación sea muy distinta, y el Ibex 35 seguirá moviéndose dentro de la línea estrecha de los últimos días, con una fuerte resistencia en los 7.000 puntos.

La jornada finalizó con una modesta subida del 0,35% para el índice general de Madrid y un 0,44% del Ibex 35. En la semana, este último indicador se anotó un descenso del 0,92%, por lo que queda en los 6.930,80 puntos para la sesión del lunes. En el resto de las plazas europeas las subidas han sido más abultadas, con un 1,27% en Londres y una ganancia del 1,12% para París. El volumen de negocio en el mercado continuo se situó en uno de los niveles más bajo del ejercicio, con tan sólo 952 millones de euros.

El euro perdió una pequeña parte de lo ganado en jornadas anteriores al marcar un cambio medio en 1,1326 dólares. En el mercado de deuda, significativo fue la fuerte subida de los precios y, por tanto, una caída de la rentabilidad de los bonos, hasta situarse en el 4,04%, frente al 4,13% del día anterior. El petróleo fue centro de atención al superar los 30 dólares el barril de crudo Brent.