Cascos suaviza los efectos de las obras en Sol-Gran Vía ante las críticas políticas

El Ministerio de Fomento da marcha atrás en Sol. El proyecto para construir la macroestación de cercanías sufrirá diversas modificaciones para intentar minimizar los efectos sobre el tráfico y el comercio en la zona. Tras varios meses de quejas vecinales y protestas de la oposición (PSOE e IU), el ministerio de Francisco Álvarez-Cascos ha reconocido implícitamente el colapso que amenazaba al centro neurálgico de la ciudad.

El Gobierno garantizó, según una nota de prensa difundida ayer, que durante las obras se mantendrán abiertos como mínimo cuatro carriles (dos por sentido) para el tráfico de la Gran Vía, frente a los dos previstos inicialmente.

Respecto a la calle de la Montera, bajo la cual se construirán los andenes de la estación, aseguró que en la zona sur "desaparece la afección". En el resto de la calle, la línea de obra se aleja a más de dos metros de las casas, con lo que todos los portales serán accesibles. Ésta constituía una de las quejas más importantes de los vecinos de Montera.

El compromiso también contempla que los trabajos no afectarán a las aceras de la Gran Vía más que en zonas localizadas para la ejecución de pozos, y que la línea 1 del metro entre Sol y Gran Vía se mantendrá en funcionamiento a lo largo de toda la obra. Los planes de Fomento preveían que esta línea estuviese cortada durante un mes.

El departamento de Álvarez- Cascos atribuye los cambios a los informes de las comisiones técnicas creadas entre Fomento, la Comunidad y el Ayuntamiento de la capital. El 22 de julio hubo la primera reunión de la llamada Comisión Ciudadana Puerta del Sol. Ya entonces, el Gobierno central dijo que las obras se paralizarían durante navidades. Ayer reiteró esta intención y añadió que entre el 6 de diciembre y el 12 de enero sólo discurrirán bajo la superficie.

Fomento anuncia que ya ha iniciado la correspondiente modificación de las soluciones técnicas inicialmente previstas sin variar la funcionalidad en los intercambios entre la nueva línea de Cercanías y las líneas de Metro.

Cascos ha dado marcha atrás a la inicial decisión de cerrar la estación de Gran Vía durante 30 meses. Ahora afirma que, a lo largo de los cuatro años de duración de las obras, sólo serán necesarios cierres esporádicos de 15 días en la fase final de ejecución de las nuevas galerías.

En los alrededores de Puerta del Sol, Fomento precisó que "desaparece la afección" a la calle de Espoz y Mina, y que "se retranquea la afección" a la línea de casas a dos metros durante el desvío de servicios [agua, luz, alcantarillado] y más de cinco metros mientras duren las obras.

Las molestias a la línea de casas quedarán limitadas, de forma que las obras se realicen en tramos de calle no superiores a 30 metros durante un mes en cada zona. El sistema para las galerías de desvío de servicios permitirá que éstas se excaven en mina, sin afectar a la superficie más que lo estrictamente necesario para la seguridad y aireación de los operarios y, puntualmente, para los entronques.

El ministerio dispone de una oficina de atención al público situada en la carrera de San Jerónimo, 18, para canalizar las reclamaciones y sugerencias de los vecinos afectados.