Los liberianos amontonan cadáveres para exigir la ayuda de EE UU
La ofensiva rebelde contra Monrovia, apoyada en un intenso fuego de artillería sobre el centro de la ciudad, causó ayer decenas de muertos y llevó el caos a la capital de Liberia. Ante la Embajada de Estados Unidos, que alberga a cerca de 10.000 refugiados, se manifestaron grupos de liberianos, que amontonaron cadáveres en la entrada de la legación para protestar por la pasividad de Washington. "Si no vienen a ayudarnos, deberían irse", dijo un civil. Cuarenta marines llegaron ayer a Monrovia para proteger el recinto diplomático. Otros 4.500 marines fueron puestos en alerta. Bush no quiso comprometerse ayer a patrocinar una fuerza de interposición internacional.
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