Un himno de voces
La música no sonó por un fallo técnico y los nadadores la cantaron desde el podio y la grada
Le sucedió a la selección española de waterpolo cuando conquistó el título Mundial hace dos años en Japón y ayer, en el Palau Sant Jordi, se repitió la situación. Un falló técnico impidió que sonara por megafonía el himno de las Barras y estrellas (The Star-Spangled Banner). Si en Fukuoka, los jugadores españoles entonaron el Viva España, ayer las componentes del equipo estadounidense de relevos 4x100 libres, tras aguardar de forma infructuosa, ayudadas por sus compañeros desde la grada y entre risas jocosas, entonaron a capella la letra del himno estadounidense.
- Despedida sin debut. Fue por la mañana, en la cuarta serie de los 50 mariposa. El nigeriano Ali Maiga Akibou se subió al poyete de la octava calle, no en vano su mejor marca era de 50 segundos, casi el doble de los que suelen invertir los mejores, estiró los brazos, y, quien sabe si debido a la emoción, se lanzó al agua antes de que sonara la bocina de salida. Resultado: descalificación. Imploró en vano a los jueces pero acabó comprendiendo su tragedia con desolación, aunque se lo tomó con deportividad.
- La cicatriz de la guerra. Dos de los tres nadadores iraquíes que compiten en los Campeonatos del Mundo compitieron ayer. Lo hicieron en los 50 metros mariposa. Zaid Saeed, con 28.30 segundos, ocupó el puesto 99. Peor lo tuvo Sarmad Mohamad. Fue el penúltimo de los 119 que compitieron, aunque superó en la clasificación al descalificado Akibou. Mohamad invirtió 32.03 segundos en la prueba. Pero su actuación fue más que meritoria. Sólo hace unos meses, cuando conversaba con sus amigos en las calles de Bagdad, fue alcanzado por la metralla de una bomba. Ayer, nada más concluir la prueba, atendió a la prensa, todavía en bañador, con las cicatrices que recorren su abdomen a la vista. Volvió a explicar lo mucho que lamenta no haberse podido preparar debido al conflicto bélico que libra, desde hace más de cuatro meses, Estados Unidos contra su país.
- Cosa de niños. En la primera serie que, a las nueve de la mañana, alzó el telón a las pruebas de natación de los Campeonatos del Mundo compitió la nadadora de maldivas Aminath Rouya Hussain, de tan solo 13 años. Obtuvo el peor tiempo de todas las series, 1m 33.43s., en los 100 mariposa, prueba en la que brilló la estadounidense Jenny Thompson, que logró el mejor tiempo, récord de los campeonatos incluído.
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