El promotor Cobo Calleja dio los poderes mientras estaba ingresado en Oviedo

Manuel Cobo Calleja, padre del primer teniente de alcalde de Madrid, otorgó poderes sobre sus empresas a su hijo en 19991 mientras estaba ingresado en un hospital de Oviedo. El vicealcalde de Madrid aseguró ayer que un detalle que le sorprendió el viernes cuando se enteró de que él era apoderado de unas empresas de su padre, con quien no tiene relación desde que 1986 (cuando éste se separó de su madre), es que los poderes notariales estuvieran fechados en Oviedo, donde Cobo Calleja no ha residido nunca. Relató que este fin de semana, al tener que informarse de este asunto, supo que su padre estuvo ingresado en un hospital de Oviedo. Y concluyó que, pese a las nulas relaciones entre ambos por cuestiones que afectan sólo a la intimidad familiar, "entra en la condición humana" que, al atravesar un momento difícil, su padre pensara en que, "por si le pasaba algo", su hijo podía ocuparse de sus negocios.

Tal ocupación, además, según subraya el teniente de alcalde, podría haber ocurrido sin problema legal alguno en 1991, pues el PP estaba en la oposición en la Comunidad de Madrid y él trabajaba como abogado. No ocurrió porque no se trataban. Y ésa es una de las pruebas lógicas que Cobo aporta para demostrar que no tenía la más remota idea de que su padre le hubiera apoderado en sus negocios inmobiliarios, unas empresas que tuvieron su momento de expansión en los años sesenta y setenta, con la construcción del polígono industrial Cobo Calleja en el Ayuntamiento de Fuenlabrada.

Revocación

"Él es muy libre de dar un poder y pudo ocurrir que estuviera preocupado por si le volvía a ocurrir alguna cosa", relató el vicealcalde en las dos entrevistas radiofónicas que concedió por la mañana. La segunda prueba lógica para mostrar que él no sabía nada de esos apoderamientos es que, en marzo de este año, su padre, ya prácticamente retirado, revocó la mayor parte de esos poderes. Y comunicó al notario que "obraba en su poder la primera copia de los apoderamientos". Es decir, los tenía porque, según el primer teniente de alcalde, "los tuvo siempre".

La tercera prueba lógica, y legalmente concluyente salvo que se demuestre lo contrario, es que el número dos de Ruiz-Gallardón "nunca" ha utilizado ninguno de esos poderes notariales.

Manuel Cobo asegura que "todo el mundo" sabía, en su partido y en el mundo de la política de Madrid, que su padre es el promotor inmobiliario Cobo Calleja y muchos también conocían que ambos estaban distanciados desde hace años. Por eso, la información le pareció especialmente "sospechosa" y sólo explicable como una maniobra de alguien que pretenda hacer mucho daño no tanto a él como a su jefe y amigo, Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde, presidente en funciones y aspirante a la sucesión.