Una constructora a la que CPV cedió una parcela se considera afectada por la "trama"

La constructora Hermanos Burgos de Magán, a la que CPV -promotora que estafó presuntamente a 1.200 familias en los barrios del norte de Madrid- cedió una parcela el día antes de que sus responsables entrasen en prisión, se considera afectada también "por la trama". La constructora recuerda que CPV dejó de pagarle facturas por la construcción de unos chalés en Magán (Toledo) y que, por eso, interpuso una demanda. El fin de la denuncia era "embargar los numerosos bienes que figuraban en 2002 a nombre de CPV, si bien, antes del embargo judicial, se llegó a un acuerdo y se cobró parte de la misma, pero no todo".

Por eso, según la versión de la constructora, la deuda que mantenía CPV con ella era de 1,8 millones de euros, aunque la empresa se conformó con 1,17 millones (el valor de la parcela cedida).

Dos millones

La constructora afirma que es "absolutamente falso que el solar que se entregó en pago de la deuda estuviera valorado en dos millones de euros", tal y como mantienen los abogados de los 1.200 afectados por la presunta estafa. "Cuando se interpuso la demanda de reclamación, CPV adeudaba por las trabajos de construcción de los chalés ejecutados, incluidos los impuestos, 1,17 millones de euros. El acuerdo para evitar los embargos consistió en cerrar definitivamente toda relación con CPV, resolviendo los contratos firmados, por lo que la deuda ascendía a trabajos no pagados, más los daños y perjuicios por la resolución (1,8 millones).

Los responsables de la constructora mantienen que dejaron "muy claro ante el juez" que no les quedó "otra opción que llegar al acuerdo con CPV por debajo de la deuda real. Ya que de lo contrario podríamos haberlo perdido todo, lo que habría supuesto el cierre de nuestra empresa", afirman.

Hermanos Burgos de Magán asegura que la empresa es la "mayor afectada por el montante de la deuda y seguirá siendo la más afectada al final de todo".