Una media diaria de más de 118.000 personas utilizaron Metrosur en junio

Metrosur, la línea 12 de Metro que une los municipios del sur de la región, echó a andar el pasado 11 de abril. Durante el pasado mes de junio esta línea superó los 3,1 millones de viajes, según datos del Gobierno regional. Esta cifra supone un incremento superior a 150.000 viajes respecto al pasado mes de mayo.

Además, el primer mes de funcionamiento, Metrosur registró 1,8 millones de viajes, por lo que el uso de la línea ha ido en aumento. La media de utilización un día laborable ha sido, en el mes de junio, de 118.481 viajes.

La estación de Puerta del Sur, que conecta Metrosur con la línea 10 del suburbano, fue la más utilizada por los pasajeros, con 186.286 viajes mensuales. Después, las que más número de pasajeros registraron fueron las que tienen conexión con las estaciones de Cercanías de Renfe: Móstoles Central, Getafe Central, Alcorcón Central y Leganés Central.

Otra estación que también registra mucho tránsito de pasajeros es la de Pradillo (Móstoles), ya que está situada cerca de la sede del Ayuntamiento de esta localidad, del Registro Civil y de los Juzgados de Primera Instancia. La estación de Juan de la Cierva (Getafe), próxima al centro de salud Sánchez Morata y al liceo del mismo nombre de la estación, también está siendo muy concurrida.

Metrosur tiene un trazado de 41 kilómetros de largo y 28 estaciones que unen los municipios de Alcorcón, Fuenlabrada, Getafe, Leganés y Móstoles, entre sí y con la capital, a través de la ampliación de la línea 10. En total, da servicio a una población de más de un millón de vecinos.

El recorrido en suburbano entre los cinco municipios del sur dura alrededor de 58 minutos, ya que los trenes, de última generación, alcanzan hasta los 110 kilómetros por hora. Los viajeros que utilizan Metrosur y vienen o van a la capital tienen que picar dos veces el billete de metrobús, algo que ha sido muy criticado tanto por los usuarios como por los alcaldes de los municipios por donde pasa la línea.

La obra, una de las mayores a escala de infraestructuras de todo el mundo, ha costado 2.600 millones de euros y ha tardado cuatro años en hacerse realidad. Más de 14.000 obreros participaron en los trabajos dirigidos por el ingeniero Manuel Melis.