Las vacaciones más esperadas

Muchos no han visto el mar y desconcen que es una piscina. Son niños con edades comprendidas entre los 8 y 12 años que durante dos meses dejarán las tiendas de campaña de los campamentos de refugiados saharaius del Tinduf (Argelia) y disfrutarán de unas vacaciones junto a familias valencianas.

Un total de 500 niños saharauis llegarán a bordo de 3 aviones, en la madrugada del próximo 2 de julio, al aeropuerto de L'Altet para pasar el verano en la Comunidad Valenciana, dentro del programa Vacances en Pau, que organiza la Coordinadora de Asociaciones de Amistad conel Pueblo Saharaui, con el apoyo de diversos colectivos cívicos y varios ayuntamientos. En Alicante se quedarán 150 niños, el resto se repartirán entre las provincias de Valencia y Castellón. Estos niños serán acogidos por familias voluntarias, y durante su estancia, además de participar en diversas actividades lúdicas y excursiones, se someterán a unas revisiones médicas.

"El problema del pueblo saharauí va más allá de lo material y es un tema político"

La delegada del Frente Polisario Saharaui en Alicante, Fatma Sidi Nafe, dijo que estas vacaciones "ayudan a aliviar" su sufrimiento, y confía en que el problema del Sáhara se resuelva "por una vía justa", y respetando sus derechos. En este sentido, Enrique Cerdán Tato, presidente de la Coordinadora en Alicante, criticó que el plan de paz de la ONU para poner fin al conflicto "se haya demorado tanto", y ahora se aplace la consulta sobre la autodeterminación. La propuesta última contempla "una autonomía bajo la hégira de Marruecos", y dentro de cinco años "celebrar un referendum de autodeterminación pero en el que podrán votar todos los colonos marroquíes". Cerdán Tato rechaza esta solución y pide que se celebre una consulta "libre y transparente", con unos censos actualizados. Mari Pau Vila, encargada del programa Vacances en Pau, confía que esta iniciativa sirva para que los niños saharauis conozcan "otra realidad y salgan del infierno en el que viven", pero al mismo tiempo también servirá para que la sociedad española "comprenda el problema del pueblo saharaui, que va más allá de lo material, y es un problema político". A finales del mes de agosto, cargados de regalos y con mucha ilusión por ver a sus padres, estos niños regresarán al Tinduf.