"Me siento como una adolescente"
A Chrissie Hynde (Akron, Ohio, 1951) lo que le importa es subirse a un escenario, coger la guitarra eléctrica a la altura de las caderas y casi besar el micrófono mientras canta. Lo demás es secundario. Vive el rock de la forma más clásica. Es ya una de las pocas que quedan de su especie y además fue siempre de las escasas mujeres en este negocio. Chrissie Hynde no sólo no está agotada sino que dice disfrutar ahora de su carrera más que nunca.
Disfruta, y son pocas cosas las que le preocupan respecto a la comercialización de su música. Las canciones de su nuevo disco, por ejemplo, se pueden escuchar por Internet desde hace un par de meses, cosa que ella no sabía, ni le importa. "No he usado Internet", dice con actitud algo chula, pero simpática. "Me hace feliz que la gente escuche mi música de cualquier forma", continúa. "Si luego compran mi disco significa que podremos seguir manteniendo nuestro contrato discográfico. Si no vendemos suficientes discos no nos renovarán, como sucedió con Warner. Si vendemos suficientes álbumes también podremos vender entradas a conciertos e ir de gira. Es lo único que me interesa, lo que me permitirá seguir adelante. Me da igual si se bajan de Internet, si graban los conciertos o si hacen fotos".
Tiene la experiencia y la energía para hacerlo de esa forma y ahora parece haber encauzado su carrera a la exacta medida de su persona. "Es divertido hacer discos, ir al estudio, es fantástico escribir las canciones. Pero lo que me encanta es ir de gira, visitar ciudades distintas. Cada una de las etapas me gusta, siempre y cuando se mantenga dentro de ciertos límites. No quiero ir de gira doce meses al año o pasarme ese tiempo en el estudio", afirma. "Cuando tenía 28 años pensaba que a esta edad ya lo habría dejado pero, por el contrario, lo disfruto mucho más ahora porque mis hijos han crecido y no tengo a ningún hombre que me dé la lata. Me siento como una adolescente, puedo hacer lo que me dé la gana y la banda suena mejor que nunca".
De su nuevo álbum, Loose
screw (tornillo suelto), emana una cadencia reggae. "Es la idea que tenía en mente, un disco reggae. A mis compañeros les gusta el reggae. No es algo que esté de moda, pero eso no nos importa. También quería que fuera una invitación a bailar sin ser necesariamente un disco de baile. Simplemente que te haga balancear el cuerpo", comenta. El gusto que Chrissie Hynde tiene por el reggae no es algo que venga de muy lejos. "Como soy americana no crecí escuchando reggae, sino pop y rock. Al llegar al Reino Unido, a los 23 años, lo escuché por primera vez y aluciné, pensaba que era un ritmo que iba a arrasar en el mundo, cosa que no sucedió del todo. Tiene algo hipnótico. El reggae ha tenido influencia en el rock inglés y algo en el americano, pero decididamente ha influido mucho en las músicas del mundo. Y ahora con todo lo del techno empiezas a encontrar que se hace muy buen hip hop en francés. El rock no termina de sonar bien en francés, pero el reggae y otras actitudes suenan fantásticamente bien en otras lenguas. Por alguna razón el rock es muy restrictivo culturalmente, es difícil cantarlo en otro idioma y es una pena. En italiano suena fatal también. En cuanto al castellano, si el rock tiene influencia latina sí se puede cantar en ese idioma. Pero, en general, es muy limitado. Es una buena noticia que haya tantas formas musicales hoy, la mezcla se va enriqueciendo y tanto el reggae como la música latina tienen un papel cada vez mayor. Otra cosa curiosa es que hay un tipo de música que no se puede cantar en inglés, y es la ópera. Se puede cantar en casi cualquier otro idioma, pero en inglés suena detestable. Hay algo de justicia poética en esto. El rock le dio al inglés lo que la ópera le impedía", observa esta diva del rock.
Dentro de su búsqueda, Chrissie Hynde no parece muy tentada por la música electrónica. "Lo que pasa es que somos una banda de cuatro o cinco personas. Dos guitarras, bajo, batería y a veces un teclado. Y prefiero ceñirme a lo que sé hacer, lo que no quiere decir que no me interesen otras cosas. En este disco vienen dos temas adicionales. Una es la versión en español de Complex person (Una persona compleja) y I wish you love, un standard de jazz. Este último lo hice para una banda sonora. Puedo hacer canciones así, pero no es el sonido de The Pretenders. Respecto a la otra, cantar en español me encantó, aunque fue difícil. Sé que mi pronunciación no es muy buena, aunque me alegro de que la letras se pudieran traducir tan bien al español. Mi marido, que es colombiano, lo hizo".
Aparte de sus propios temas, en este álbum incluye también una versión de Walk like a panther, de Jarvis Cocker, cantante de Pulp. Ya Marianne Faithfull ha cantado algún tema de este compositor que Hynde también aprecia. "Creo que es uno de los grandes letristas de pop que hay en el Reino Unido actualmente. Esta canción no era de Pulp sino de otra banda de su misma ciudad, simplemente una canción que me gustaba, sin más", afirma.
Es, en general, un disco placentero para escuchar, nada agresivo, un álbum que fluye y acompaña. "Creo que la gente escucha mucha música en sus coches", señala la cantante. "No quería parecer demasiado exigente ni introspectiva, aunque todas las canciones tienen algo personal o autobiográfico. Yo quería algo accesible y fácil de escuchar porque no quiero aburrir a la gente. Quiero canciones cortas y dulces".
Viene a España con su grupo como teloneros de lujo en la gira de los Rolling Stones. "Mi recuerdo más antiguo de los Rolling Stones es un single de ellos, I just want to make love to you. Lo regalaban en una piscina pública, supongo que los de la radio local, cuando yo tenía como 14 años, antes de que se hicieran famosos. Me encantaba la cubierta con esa foto tan guapa, porque iban como de tipos feos. Fue una gran inspiración para mí", relata.
"Después los he visto con cada banda que han tenido desde la época de Brian Jones. Hicimos ya algunos conciertos con ellos en Estados Unidos y fue fabuloso. Son muy cálidos y amistosos con nosotros. Y el espectáculo actual es de los mejores de su carrera, no pensaba que todavía fueran capaces de hacerlo tan bien".
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