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Reportaje:

La pena de Luis Jaraba

Un cordobés lleva un año en la cárcel por un delito del que lo exculpan la víctima y un autor

Luis Jaraba, cordobés de 33 años, consumió ayer el primer permiso de tres días que le han concedido después de algo más de un año en la cárcel por un delito que no cometió. No lo hizo porque así lo dice la víctima y uno de los autores del robo, Antonio Sánchez Medina. El 13 de octubre de 1997, dos hombres atracaron con una navaja a María Luisa J. A. Le quitaron 577 euros en joyas y le obligaron a sacar 600 euros de un cajero. Uno de ellos fue Antonio Sánchez; del otro nada se sabe. La Audiencia Provincial de Córdoba condenó a Luis Jaraba a tres años y medio de prisión. Ahora, su nuevo abogado, Manuel Ortega, prepara una querella por prevaricación contra los tres magistrados que le condenaron, uno de los cuales ya falleció.

¿Por qué fue condenado? La víctima le señaló tras el robo en una fotografía policial y en una rueda de reconocimiento en la que estaba junto a un magrebí, un hombre de raza negra y uno de los nueve hermanos de Jaraba. La víctima señaló a la persona a la que había identificado en la fotografía policial.

Pero en el juicio la víctima ni siquiera coincidió con Luis Jaraba porque acudía en calidad de testigo protegido. Dijo que el coautor tenía un evidente defecto en un ojo que Luis Jaraba no tiene. Entonces, Jaraba fue condenado y la petición de revisión al Tribunal Supremo no prosperó. Encarnación Jaraba lamenta que durante el juicio el abogado de su hermano no hiciera todo lo posible.

Manuel Sierra, que era abogado de la víctima, María Luisa J. A., se ha convertido ahora en una de las personas que ayuda a Luis Jaraba a recuperar la libertad. "Es una cuestión de humanidad", explica. Tras la condena, María Victoria J. A. rectificó y declaró ante notario que Luis Jaraba no era uno de los ladrones. El autor confeso del robo, Antonio Sánchez, escribió cartas exculpatorias a la Reina; al ministro de Justicia, José María Michavila; al fiscal general, Jesús Cardenal; al Tribunal Supremo, al Tribunal Constitucional y a los medios de comunicación. De nada sirvió porque los recursos están agotados.

La querella que Manuel Ortega prepara contra los magistrados ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía permitirá remover el caso y presentar un nuevo recurso de revisión extraordinaria ante el Supremo. En ese punto es donde Manuel Sierra pretende aportar la rectificación de la víctima y el testimonio de Antonio Sánchez, uno de los ladrones, que fue condenado en un juicio distinto al de Luis Jaraba, a pesar de que eran juzgados por el mismo delito.

Es la única salida para Jaraba, quien no quiere hablar de indulto porque se siente inocente y así lo ha repetido una y otra vez, aunque eso le obligue a continuar en prisión. Aunque Jaraba no está dispuesto a reconocer un delito que no ha cometido, Sierra prepara tanto el indulto como la petición del tercer grado "porque lo más importante ahora es sacarle de la cárcel, después ya se verá".

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"Estoy secuestrado por la justicia y a veces me vuelvo loco allí dentro. Lo fácil sería haberlo hecho y cumplir la pena, pero no lo hice y eso no se lo deseo a nadie", afirma Luis Jaraba. "No quiero dinero, sólo que me dejen limpio", apela lleno de impotencia y ansiedad.

Luis Jaraba tiene 33 años, pero una minusvalía psíquica por un accidente hace que su edad mental sea 20 años. Se dedicaba a vender chatarra y a cuidar de su madre en un barrio marginal de Córdoba cuando fue detenido el 11 de marzo de 1998 tras ser identificado por María Luisa J. A. "Se supone que estaba en busca y captura, pero él recogía chatarra del cuartel de la policía donde le llevaron detenido; si fuera culpable no lo haría", cuenta su hermana Encarnación, quien agrega que no dispuso de abogado en comisaría.

Luis Jaraba estaba fichado porque fue detenido por vender cerveza en la feria de Córdoba hace más de diez años. Su hermana asegura que él no la vendía, que sólo le prestó la nevera a un amigo. "Los policías le pegaron una paliza y le ficharon por atentado a la autoridad", relata. Aquel juicio salió bien pero su foto quedó en los archivos.

Con esa foto comenzó la pesadilla de Luis. Ayer volvía a prisión después de un efímero respiro, pero no olvida que está "marcado para toda la vida".

Luis Jaraba vuelve a la cárcel tras un permiso.
Luis Jaraba vuelve a la cárcel tras un permiso.F. J. VARGAS

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