Robredo da el golpe

La jornada fue explotando poco a poco hasta que se produjo el estallido final. Tommy Robredo, 31º mundial, se convirtió en su principal protagonista al eliminar al número uno, el australiano Lleyton Hewitt, después de haber sido dominado en las dos primeras mangas y de perder por 0-3 en la quinta. "Es mi mejor triunfo", reconoció el de Hostalric, de 21 años, tras su victoria en 3,24 horas. ""Hasta ahora siempre recordaba mi victoria de 2001 ante Ferrero en el Open de EEUU. Pero lo de hoy lo supera con creces". Entonces, la trascendencia de su éxito fue su juventud e inexperiencia. Ahora, su victoria se produjo en las circunstancias menos imaginables: remontando un partido que tuvo perdido en varias ocasiones y frente al número uno mundial.

"Creo que lo fundamental", agregó el catalán, "es que he estado siempre muy bien de cabeza. No me ha importado ir dos mangas abajo, ni perder por 3-0 en la quinta. Siempre he seguido luchando, convencido de que podía ganarle". Su odisea permitió cerrar una jornada española pletórica, pues pasaron también a los octavos de final Albert Costa, Juan Carlos Ferrero, Félix Mantilla y Conchita Martínez. En total, España ha colocado a cinco jugadores en la cuarta ronda del cuadro masculino, una marca que se acerca al record de seis establecido en 1998. Aquel año, Moyà y Corretja disputaron la final, Arantxa ganó y Robredo perdió la final junior.

Ayer, las emociones no fueron tan fuertes. Sin embargo, la victoria de Robredo rompió todos los pronósticos y elevó más aún el listón del tenis español. "Está claro que en tierra batida la actitud debe ser distinta", reconoció Hewitt. "Las situaciones son diferentes y creo que tengo un problema de ritmo, que debo resolver". El australiano había ya anunciado sus temores ante el español. Y Robredo le fue confirmando que tenía razón. El peor momento fue en los inicios de la tercera manga, cuando Hewitt igualó a dos juegos: "Ahí remonté un juego muy peligroso que me permitió meterme otra vez en el partido", explicó Robredo. "Entonces, él comenzó a fallar un poco y eso me dio moral para seguir luchando".

Su remontada fue pareja a la que debió realizar también Albert Costa, por tercera vez consecutiva, para avanzar a la cuarta ronda. Defensor del título, el leridano se ha acostumbrado a sufrir, a ponerse el mono de trabajo para resolver los partidos porque su mejor tenis parece haberle abandonado. Ayer, Costa volvió a perder las dos primeras mangas frente al ecuatoriano Nicolás Lapentti (58º mundial), pero volvió a salir airoso. Remontó hasta la quinta manga y luego le costó resolver, a pesar de que Lapentti sufrió calambres en la pierna izquierda e iba cojo por la pista al final. "Para mí era muy difícil jugar contra un rival lesionado, porque seguía sacando muy bien y tomaba todos los riesgos. Estaba indignado conmigo mismo. Me costó romperle. Pero lo hice

y demostré de nuevo que quiero seguir en el torneo, que estoy dispuesto a luchar hasta el final".

Lo mismo aseguró Ferrero, que ayer ganó a Henman y que en octavos de final se enfrentará a Félix Mantilla. "Todos tenemos hambre. A partir de ahora hay que ir con el cuchillo en la boca", indicó el valenciano. El torneo ha entrado en su fase decisiva. En octavos, Robredo jugará contra Kuerten o Gaudio y Costa ante Clément. Hoy ya lo hará Moyà ante Jiri Novak.

Resultados: 16º de final. Mujeres. V. Zvonareva (Rus.)-M. S. Lorenzo, 6-3, 6-4. C. Martinez-T. Pisnik (Esl.) 6-3, 6-3. Hombres: A. Costa-N. Lapentti (Ecu), 4-6, 4-6, 6-3, 6-4, 6-4. T. Robredo-Ll. Hewitt (Aus.), 4-6, 1-6, 6-3, 6-2, 6-3. F. Mantilla-F. Vicente, 7-6, 6-3 y 6-3. J. C. Ferrero-Tim Henman (RU), 4-6, 6-2, 6-4, 6-2.