Los socios de Caixa Rural Vila-real deciden hoy si entran en Ruralcaja

El consejo rector de Caixa Rural Vila-real se enfrenta hoy, con un buen número de accionistas en contra, a la votación que debe decidir si la caja local se integra en Ruralcaja. La asamblea está convocada a última hora de la tarde. El pasado mes de marzo, la inesperada afluencia de socios obligó a suspender una primera asamblea ante la imposibilidad de albergar a las más de 3.000 personas que acudieron.

Pese a la extrañeza de algunos por los dos meses de distancia, la nueva convocatoria fue fijada en un lugar lo suficientemente amplio como para albergar a todos aquellos socios que acudan y que, en total, suman más de 10.500.

La asamblea de votación de la integración de Caixa Rural Vila-real en Ruralcaja (compuesta por las cajas de ahorros de Valencia, Alicante y el grupo Credicoop de Castellón) ha estado precedida, esta semana, por otra votación que no vaticina un resultado halagüeño para los partidarios de la unión. El consejo rector quiso separar la aprobación de la gestión de la asamblea que tratará la integración y se encontró con el rechazo de la mayoría de los asistentes a las cuentas de 2002 presentadas por la dirección. Así, con 1.231 votos en contra y 991 a favor, el presidente de la entidad, José Cantavella, vio cómo se rechazaba el informe de gestión pese a que los números resultaban positivos.

La asamblea se convirtió, además, en un pulso entre ambas fracciones que provocó, incluso, la elección de una nueva mesa para presidir la sesión. El consejo rector ya ha anunciado la intención de impugnar aquella votación ya que consideran que el rechazo carece de motivos más allá de la muestra de fuerza del sector contrario a la unión de ambas entidades.

La oposición a la integración ha estado liderada por varios particulares. El pasado mes de noviembre se firmó el protocolo de integración, avalado por el consejero de Economía, Vicente Rambla.

Días antes de que se celebrara la asamblea para votar esta integración comenzaron a hacerse fuertes las voces en contra de la misma que aseguraban que la operación suponía la pérdida de autonomía y un "regalo" para Ruralcaja, dados los buenos resultados de la caja local. El consejo rector y sus partidarios no han sabido o no han podido rebatir o dar razones a los argumentos de los contrarios y muestra de ello fue lo ocurrido en la asamblea que debía aprobar las cuentas de la entidad. Hoy la votación dilucidará qué movimiento es mayoritario.