PSOE e IU cuestionan la legalidad del pacto con el presidente del Real Jaén

Los dos grupos de la oposición en el Ayuntamiento de Jaén, PSOE e IU, creen que puede haber indicios de delito en el pacto entre el alcalde, Miguel Sánchez de Alcázar, del PP, y el presidente del Real Jaén, el empresario malagueño Manuel Gil Vázquez. Éste anunció el martes su compromiso de construir una ciudad deportiva y una zona de ocio con una inversión de 96 millones de euros y la creación de 800 empleos. A cambio, Gil Vázquez, que exhibió dos contratos suscritos el 31 de julio de 2002 con el alcalde, añadió que el compromiso municipal era cederle dos solares para la construcción de 120 viviendas así como el Palacio Condes de Corbull para edificar un hotel.

Gil Vázquez acusa al alcalde de incumplir el acuerdo firmado el pasado verano. El PP lleva en su programa electoral la construcción de ese complejo deportivo. Este pacto se enmarcó dentro de la compra de acciones del Real Jaén -hasta entonces en manos del Ayuntamiento- por el empresario malagueño.

El PSOE calificó la operación como un elemento de "corrupción política de mucha gravedad". El candidato socialista, Marcos Gutiérrez, anunció que los servicios jurídicos de su partido estudian acciones legales por un presunto delito de prevaricación. Para Gutiérrez, el alcalde "ha engañado" a los jiennenses al intentar, "con nocturnidad y alevosía", vender el Palacio de los Condes de Corbull y el solar del antiguo albergue juvenil.

Los socialistas presentarán en el consejo de la Sociedad Municipal de la Vivienda (Somuvisa) de hoy jueves una moción pidiendo explicaciones al gobierno municipal del PP sobre este pacto "espúreo".

También IU ha pedido la convocatoria urgente de la Comisión de Gobierno. La candidata, Dolores Nieto, cree que puede haber indicios suficientes para que la Fiscalía abra diligencias. A su juicio, lo sucedido es un reflejo de "los acuerdos secretos que hay con los grupos de presión, realizados a espaldas de los ciudadanos".

El alcalde jiennense, Miguel Sánchez de Alcázar, dijo que el acuerdo alcanzado con Gil Vázquez era sólo una "declaración de intenciones" que ahora hay que convertir en fórmulas jurídicas donde "se respeten los procedimientos legales".

El alcalde negó que se hubiera ocultado nada y se mostró confiado en un "entendimiento" con el presidente del Real Jaén, a pesar de que éste ha pedido un voto de castigo para el PP y ha amenazado con dejar el club si tras el 25-M continúan gobernando los populares.