Bruce Springsteen se cita esta noche con Barcelona en el estadio Olímpico
El el rockero de New Jersey se encuentra en la ciudad desde la madrugada de ayer
Segunda oportunidad. Quienes no vieron a Bruce Springsteen en su última visita a Barcelona en octubre pueden sacarse la espina esta misma noche. Ayer aún quedaban algunas entradas que al precio de 59 - garantizan una visión cercana del superhéroe y de su cuadrilla de héroes, la E Street Band. Su despliegue de superpoderes rockeros se producirá a partir de las 21.00 horas en el estadio Olímpico Lluís Companys, donde se desplegará un espectáculo cuyo epicentro estará en en el nervio y emoción de unas canciones que huelen a historia por sus cuatro costados.
Ése es el gran activo de Bruce Springsteen, un activo desplegado en su último concierto en Barcelona, un recital de tal impacto emocional que ha funcionado como perfecto altavoz y reclamo para que el Boss haya vuelto pocos meses después para realizar una gira que ya ha pasado por Gijón y que se despide de España el lunes en Madrid.
El éxito del concierto de octubre palpita como argumento central del éxito que presumiblemente conseguirá esta noche Springsteen, quien junto a su banda actuará ante no menos de 50.000 personas que se abalanzaron sobre las entradas apenas éstas se pusieron a la venta. Ante ellas, el rockero de New Jersey desplegará un espectáculo basado en un equipo de luz y sonido de unos 700.000 vatios que iluminarán y expandirán un repertorio lleno de clásicos y convenientemente actualizado con las canciones de The rising, el disco que le ha permitido reencontrarse con su banda de toda la vida.
De todas las maneras, y a tenor de lo que Springsteen ha venido tocando en su gira europea, no es previsible que el concierto de esta noche se ajuste milimétricamente a lo que pudo verse en octubre en Barcelona. Según el guión seguido por el Boss en sus últimas actuaciones, sobre el repertorio que se vio en el Sant Jordi puede haber bastantes variaciones y al menos una docena de canciones se incorporarán al mismo para ofrecer una visión aún más amplia sobre su legado musical.
En conjunto se espera un recital que sobrepase las dos horas de duración, una muestra de que Springsteen no abandona el escenario hasta haber colmado las expectativas de sus seguidores.
Para Springsteen, Barcelona es una ciudad especial y en ella ha actuado en nueve ocasiones.
El cantante ya se encontraba en Barcelona en la noche del jueves. Llegó a las 2.00 horas de la madrugada procedente de Gijón, primera cita de su minigira española. De nuevo ha sido el hotel Arts su alojamiento y de nuevo el establecimiento volvió a convertirse en una estación del vía crucis particular que sus seguidores realizan en pos de inmortalizar una instantánea de su ídolo o, mejor aún, conseguir un autógrafo que certifique la proximidad entre el ídolo y el admirador. Se consiga o no el autógrafo, esta noche en la inmensidad del Olímpico Springsteen volverá a aproximarse a su público por medio de un espectáculo que aunque se intuye cómo será, siempre acaba sorprendiendo. Es lo que se llama la fuerza del rock, el peso de una generación.
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