_
_
_
_
EUROPA ENTRA EN CRISIS

El Gobierno británico anunciará el 9 de junio un nuevo retraso en su ingreso en el euro

Blair logra que los laboristas dejen las puertas abiertas a un referéndum antes de 2006

El Gobierno desvelará el 9 de junio en el Parlamento su dictamen sobre el grado de preparación de la economía británica para entrar en el euro, según anunció ayer el portavoz oficial de Downing Street. Desde hace semanas se sabe que ese dictamen será negativo y aplazará de nuevo, al menos por un año, el ingreso de la libra esterlina en la moneda europea. Pero el primer ministro, Tony Blair, ha forzado de aquí a entonces un amplio debate en el Gabinete sobre el euro y la política europea, un primer paso para dejar abiertas las puertas a un referéndum en esta legislatura.

Más información
Alemania se enfrenta a la recesión

No hay margen para la sorpresa. Gordon Brown, el poderoso canciller del Exchequer (ministro del Tesoro), pronunciará el 9 de junio un dictamen negativo. "Todavía no", dirá. La economía británica aún no cumple los cinco criterios, perfectamente subjetivos, que el propio Brown impuso en otoño de 1997 como condición para el ingreso en el euro: convergencia del ciclo económico británico con el de la zona euro, suficiente flexibilidad de adaptación e impacto positivo para la creación de empleo, para los servicios financieros y para la inversión extranjera.

Lo que no se sabe todavía es si el dictamen de Brown será tan taxativo como él quiere, de manera que el ingreso quede descartado al menos hasta la próxima legislatura para evitar que la permanente incertidumbre generada por las dudas británicas siga afectando a su economía. O bien se impondrá la tesis de Blair de que hay que dejar la puerta abierta a un cambio de posición y no descartar la posibilidad de un referéndum en esta misma legislatura, aunque sea apurando el plazo legal de cinco años y retrasando las elecciones generales a la primavera del año 2006.

Más allá de la posición de Gordon Brown, que ha ido aumentando su escepticismo hacia la moneda europea al tiempo que disminuían sus posibilidades de suceder a Blair como primer ministro a corto plazo, es la propia coyuntura política europea la que impide cualquier posibilidad del triunfo del al euro en un referéndum hasta que se disipen las desavenencias generadas entre la Vieja Europa (Francia y Alemania, sobre todo) y los primos transatlánticos (Estados Unidos) a propósito de la guerra librada en Irak y el modo de conducir la reconstrucción del país tras el conflicto.

Pero las filtraciones de que el responsable del Tesoro iba a aprovechar las circunstancias para aplazar cualquier referéndum hasta 2007 y el ingreso quizás hasta 2010 desató en las últimas semanas una fuerte división en el seno del Gabinete y una virulenta reacción de los partidarios del euro.

Fuga de inversiones

Las amenazas de varias decenas de empresas multinacionales, que pronosticaban una fuga de inversiones en masa hacia el continente, las declaraciones de varios ministros, diputados laboristas y también conservadores a favor de mantener las puertas abiertas a un referéndum en un plazo relativamente corto, han permitido a Blair ganar margen para provocar un debate en el seno del Gabinete desde ahora hasta el 9 de junio.

Este fin de semana los ministros tendrán acceso a los 2.000 folios de documentación elaborada por el Tesoro para sustentar su dictamen sobre el grado de cumplimiento de las cinco condiciones. El día 22 de mayo habrá una primera discusión en el Gabinete. El día 26, Brown comunicará su dictamen al resto de sus colegas. Entre el 2 y el 6 de junio, Blair y Brown se reunirán en trilaterales con otros ministros para hablar del euro y de la política europea del Gobierno laborista. El 5 o el 6 de junio el Gabinete celebrará una reunión extraordinaria para fijar su posición. Y el día 9 será el anuncio público en los Comunes.

Todo este debate, que hace unos días no estaba nada claro que fuera a producirse, permitirá a las fuerzas partidarias de la moneda europea imponer su gran objetivo: conseguir que el Gobierno se imponga una especie de hoja de ruta que marque los pasos a seguir desde ahora para conseguir que se cumplan las condiciones de ingreso.

Es decir, dejar de depender del criterio más o menos arbitrario o más o menos ventajista de Gordon Brown y poner en marcha, por primera vez desde 1997, los instrumentos que demuestren que el Gobierno laborista quiere entrar en el club de la moneda única europea y que está haciendo lo necesario para conseguirlo en un plazo más o menos determinado para ello. Y no sólo dejar pasar el tiempo, esperar y ver, como hasta ahora ha hecho el laborismo, y que en el fondo era lo mismo que defendían los conservadores de John Major.

El comisario europeo de Asuntos Económicos, Pedro Solbes, indicó ayer que a Bruselas no le preocupa el posible rechazo británico a la moneda única. "El euro se puso en marcha sin el Reino Unido y tenemos que seguir trabajando sin el Reino Unido", dijo Solbes durante una entrevista en la Cadena SER.

Tony Blair, ayer durante el acto de presentación de la candidatura de Londres a los Juegos Olímpicos de 2012.
Tony Blair, ayer durante el acto de presentación de la candidatura de Londres a los Juegos Olímpicos de 2012.AP

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_