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Reportaje:

Humor y provocación

Los Verdes optan por una campaña imaginativa para distinguirse del resto

El acuerdo con el PSOE no pudo ser y Los Verdes ha tenido que preparar su campaña en solitario al límite de los plazos oficiales con grandes dosis de imaginación para llamar la atención de los electores. "Todo ha sido muy precipitado y hemos optado por las capitales, los perímetros urbanos y la costa". Francisco Garrido, portavoz de Los Verdes de Andalucía y candidato a la alcaldía de Granada, está convencido de que su formación tiene "expectativas razonables" de determinar mayorías progresistas en las grandes ciudades y las poblaciones más castigadas por la especulación. Los Verdes presenta candidaturas en 45 de los 770 municipios de la región con una idea básica: las ciudades están gobernadas por gente que no vive en ellas y es necesario recuperar el urbanismo humanizado.

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El propio Garrido se confiesa víctima de la improvisación: "Nunca pensé en presentarme, pero después de la ruptura de conversaciones con el PSOE decidimos utilizar todos nuestros activos disponibles". Mientras Garrido concurre en Granada, en Sevilla lo hace otro histórico verde, Miguel Ángel Gómez; en Málaga, el portavoz de esta ciudad, Juan José Merino; en Córdoba, José Larios, que fue director general de la Junta; en Jaén, Ana Pérez López; en Huelva, José Luis Serrano; en Almería, Annethe Hauer, bióloga alemana que viene del Parlamento Europeo, y, en Cádiz, Vanesa Rivera.

Esta vez, Marbella, una plaza muy batallada en las pasadas elecciones, se ha caído del cartel por el "clima enrarecido y disparatado" que vive esta ciudad, dirigida por Julián Muñoz (GIL). La candidata verde en los comicios de 1999 fue Inmaculada Gálvez, ahora diputada del Parlamento andaluz, merced al acuerdo de legislatura con el PSOE, que incluye también cargos públicos en la Consejería de Medio Ambiente.

El patrimonio electoral de Los Verdes es de una decena de concejales, seis de ellos de Puebla de Don Fadrique, una localidad granadina de 2.569 habitantes que es la única en Andalucía con un alcalde verde, Augusto Martínez. La campaña les supondrá un gasto de 120.000 euros. Además de la publicidad electoral, relizarán una encuesta de 550 entrevistas que permitirá a Los Verdes conocer de una manera más científica sus posibilidades. "Nos hemos encontrado con el obstáculo de que no nos han incluido en ninguna de las encuestas institucionales y hemos tenido que encargar una propia", explica Garrido.

Los Verdes andaluces han "copiado" el modelo de campaña de sus colegas alemanes: imaginación, humor y provocación. "Salvando las distancias", matiza el portavoz y candidato de Granada, "lo que intentamos es hacer propuestas que susciten el debate y contengan radicalidad".

Los carteles escogidos dan fe de estos propósitos. En uno aparece el equipo electoral completamente desnudo, pero estratégicamente situado para no mostrar las partes pudendas, con el siguiente mensaje: Sin colorantes ni conservantes. En otro una pareja que se besa interrumpe el tráfico, y la leyenda reza: Sáltate el guión, recupera tu espacio. Los actores son Inmaculada Gálvez y Ángel Ramírez, director general de Educación Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente. "La idea es romper el lenguaje del político estereotipado porque la publicidad política formar parte ya del paisaje urbano y nadie la mira", dice Garrido.

Pleito por las siglas

En los comicios de 1999 la fuerza ecologista, recién divorciada de Izquierda Unida, concurrió con otro grupo que abandonó también la coalición, Izquierda Socialista. IU sigue aún usando las siglas de Los Verdes (LV) y tras un rosario de pleitos, una sentencia reciente del TSJA ha dado la razón a los izquierdistas. No obstante, los ecologistas se dirigirán ahora al Tribunal Constitucional.

En las anteriores elecciones consiguieron un total de 18.076 votos (10.438 en las capitales). La suma del voto urbano fue uno de los argumentos de Los Verdes para exigir mayor presencia en las listas del PSOE, con quien en principio pensaron acudir a las elecciones. La mayoría de las direcciones locales socialistas, sin embargo, habían situado a Los Verdes en puestos testimoniales, con remotas posibilidades de salir elegidos. Por ello, Los Verdes decidió presentarse en solitario, aunque en cerca de una decena de poblaciones los acuerdos se han mantenido.

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