"No queremos competir con Telefónica en precios"

Andreas Albath cumple los tópicos que se le asignan a un alemán. Es grande, rubio y tiene un marcado acento que permanece cuando habla inglés. Y es también preciso. Consejero delegado de Telegate AG, ha visitado España con motivo de la liberalización de los servicios de información telefónica, un lucrativo negocio dominado por el grupo Telefónica y en el que ahora hay varios participantes, entre ellos Telegate España. Su matriz, Telegate AG, tiene ya experiencia en romper monopolios. Fue la primera empresa privada que quebró el que mantenía la Deutsche Telekom en Alemania. Ahora que la normativa lo permite, plantea dar la batalla al gigante español. Su principal arma, un número que Albath repite en cuanto puede en la entrevista: el 11 8 11.

"Un buen servicio sólo lo pueden ofrecer operadores debidamente formados y preparados, no una máquina"

Pregunta. ¿Qué voy a encontrar si lo marco?

Respuesta. Un buen servicio. A alguien al final de la línea con una filosofía diferente de este negocio, que le ayudará a encontrar lo que busca, un número de teléfono, una dirección, un espectáculo....

P. ¿No contestará una máquina?

R. Nunca. Es una de las cosas que nos caracterizan. Pensamos que un buen servicio sólo lo pueden ofrecer operadores debidamente formados y preparados. Por eso inauguramos ya hace tres años un centro de atención de llamadas (call center) en Las Matas (Madrid) que emplea a 230 personas, y abriremos otro si crecemos lo suficiente.

P. ¿Tienen algún objetivo concreto para España?

R. Queremos tener la mayor cuota posible del mercado. Pero el objetivo final es construir un negocio sostenido y sólido, dando servicio al cliente español.

P. Ese cliente está acostumbrado al servicio del grupo Telefónica. Dígame alguna razón para elegirles a ustedes.

R. Somos distintos. No nos conformamos con dar de forma impersonal un número y ya. No queremos tener millones de llamadas al día, sino que quien contacte con nosotros quede satisfecho y repita. Queremos que el cliente se sienta satisfecho y no tenga la sensación ésa de que hay que quitarlo de la línea rápidamente. Ésa sería una de las razones. Otras es la de la tecnología. Tenemos la necesaria para dar la información no solo a través de la línea, sino también vía fax, correo electrónico o por mensaje al móvil.

P. ¿Y que información ofrecen?

R. La que nos pidan. El problema no es la base de datos. Las hay a cientos. El problema es saber utilizarlas bien, y lo hacemos. Nos gusta decir que somos unos resolvientes de problemas. En Alemania, por ejemplo, no nos llaman pidiendo sólo un número telefónico o una dirección. Nos llaman también para pedir páginas web, o información sobre tráfico o, incluso, cuando alguien pierde la cartera con las tarjetas de crédito. Nosotros le ayudamos a solucionar el problema.

P. ¿En España existe esa gama de servicios?

R. Tan amplia, todavía no, pero la habrá si vemos que hay mercado.

P. La liberalización de los directorios telefónicos encarece o abarata el servicio?

R. Yo creo que la cuestión no es ésa, sino saber qué tipo de servicio se quiere pagar y establecer un precio justo por el mismo. Lo que hace la liberalización es aumentar la competencia, y con ello, elevar el nivel de servicio en general. Por ejemplo, cuando nosotros llegamos a España, Telefónica no conectaba al cliente con el número solicitado como nosotros, y ahora lo hace.

P. ¿Pero se encarecerá el servicio?

R. Si compara nuestras tarifas, ahora son más baratas que las de TPI

[filial de Telefónica], pero no queremos competir en precio, sino en calidad, porque pensamos que el precio no es el criterio principal para que el consumidor elija entre uno y otro directorio porque es un servicio que sólo se usa ocasionalmente.

P. ¿Internet es un aliado o es un competidor?

R. Es siplemente una herramienta más. Otro canal para buscar información que tiene sus ventajas y sus desventajas.