"Los terroristas van a ir cayendo uno detrás de otro"

Junto a la economía, el asunto estrella de esta campaña para el PP es la ilegalización de Batasuna y de todo lo que pueda parecer ETA. José María Aznar lo resumió así anoche en Mestalla: "No vamos a aceptar que nos quieran meter mercancía terrorista en la España democrática".

Horas antes, en Almería, hizo una implícita referencia a los cuatro presuntos etarras detenidos ayer en Francia, una de las supuestas dirigentes de ETA y tres activistas. "Cada vez quedan menos y, los que queden, van a ir cayendo uno detrás de otro", proclamó justo después de felicitarse porque estas elecciones vayan a ser "las primeras a las que no podrá presentarse ETA. ¡Las primeras!".

El líder del PP criticó a quienes, hace un año, vieron con prevención la ilegalización de Batasuna, entre los que se incluyen muchos socialistas. "Había gente que decía que era mejor que esa gente de Batasuna no fuera ilegalizada", rememoró. "¿Qué te parece que esté libremente circulando por la calle un señor que se levanta por la mañana y dice: 'A ése hay que matarle'. Claro que esas decisiones no son fáciles porque el terror se disfraza de muchas maneras. Pero nosotros hemos dicho que son lo mismo y que están mejor fuera de la ley. Se acabó. Y es lo que hemos hecho", sentenció.

También volvió a aludir a sus buenas relaciones con el presidente estadounidense. Y, otra vez, se congratuló de que, gracias a su acuerdo con George Bush, Estados Unidos haya incluido a Batasuna en la lista de organizaciones terroristas. "No van a encontrar ningún sitio en el mundo donde les cobijen y, además, les derrotaremos con la ayuda de todos".

Cambiar las reglas

No faltó cierta conexión, al menos en la yuxtaposición de mensajes, entre Batasuna y los riesgos para la estabilidad de España. "Últimamente escucho muchos mensajes que hablan de cambiar las reglas", arrancó Aznar. Se refería a las propuestas para reformar los estatutos de autonomía anunciadas en Cataluña y en el País Vasco. A sus promotores, el PNV, CiU y el PSC, les dedicó también unas palabras: "Todos los dirigentes deben explicar si están dispuestos a jugar con la estabilidad de España, porque nosotros vamos a hacer una apuesta para conservarla con todas nuestras fuerzas".

Aznar concluyó su mitin de Mestalla pidiendo el voto: "Os pido la mayor movilización posible, que aquí está lo mejor de lo mejor, mucho mejores que yo". Y se despidió con un doble saludo: "¡Visca Valencia! ¡Viva España!"

Pero la verdadera despedida se la dieron a él, al más puro estilo valenciano. En la capital de la fallas y de la pólvora, un castillo de fuegos artificiales, que se prolongó durante casi cinco minutos, atronó la ciudad cuando el líder del PP decía adiós a sus seguidores y abandonaba el estadio de Mestalla.