Rita Barberá: "Mi ambición por Valencia es ilimitada"

P. Eduardo Zaplana eligió a Francisco Camps como candidato a la Generalitat al marcharse a Madrid. ¿Enterró su vieja aspiración de dirigir el gobierno autonómico?

R. A mi amigo Paco Camps lo elegimos todos, en una junta directiva y en un congreso, eso hay que dejarlo bien claro. En segundo lugar, no tenía nada que enterrar porque no tenía nada vivo en ese sentido. He dicho muchas veces que mi aspiración y mi pasión es Valencia. Siempre he querido ser alcaldesa de todos los valencianos; mi ambición personal es muy limitada, mi ambición por Valencia es ilimitada.

P. El PP cuenta con su tirón popular para ganar desde Valencia la Generalitat, pero apenas se la ve coincidir con Camps.

"Cuando se acomete una actuación, a lo mejor la solución no llega para todos"

R. Todos los que somos candidatos aportamos todo lo que tenemos a nuestro proyecto, que es un proyecto cohesionado. De la manera que estamos haciendo la campaña estamos llegando a mucha gente, a muchos más lugares, porque el programa de la Generalitat y el del Ayuntamiento se complementan de una manera muy clara.

P. La quema de cientos de coches en las calles sobresalta a los vecinos desde hace años. ¿Por qué no se logra atajar el problema?

R. La Policía Local y la Policía Nacional han hecho un trabajo tremendamente positivo. Se ha detenido a bastante gente, pero no responde a un movimiento organizado, ha respondido a acciones individuales o por contagio. Creo que se ha tenido una actuación absolutamente decidida y con frutos positivos de vigilancia y detención de aquellas personas que incendiaban coches.

P. ¿Afectará la guerra de Irak a los resultados de las elecciones?

R. Tras esta situación de tensión que hemos vivido, ahora, con 25 años de democracia consolidada, hay que decir que en estas elecciones los valencianos tienen que elegir su proyecto. Y yo les digo que hemos avanzado de una manera espectacular, en dinamismo, empleo, en renta familiar... No creo que Valencia se pare, porque estuvo paralizada con el PSOE. Sólo hay que recordar el año 92, que todo lo que ocurría en España ocurría fuera de Valencia.

P. Se mantienen las quejas por el déficit de centros escolares, de salud...

R. Si no hubiera quejas, estaría la ciudad terminada y una ciudad nunca lo está. Plazas escolares, me parece que no faltan: 39 actuaciones, la primera ciudad, la primera comunidad, que está cumpliendo la LOGSE. No hicieron nada los anteriores, aprobar la LOGSE y no dotarla de ni una sola peseta de inversión. Se han construido los colegios cuando ha habido un gobierno de la Generalitat del PP decidido a invertir en Valencia en el suelo que estábamos dando, con todas las dificultades de expropiación de suelo, que ha habido y muy largas. Ahora quedarán por hacer menos de una decena, de acuerdo con el mapa escolar. Se está avanzando tremendamente en el tema. Y se están haciendo los centros de salud por la Generalitat con el suelo que cede el Ayuntamiento. Los equipamientos se han acercado por decenas a todos los barrios. Ése es nuestro planteamiento, la instalación de equipamientos, todos lo que pueda necesitar la persona y su entorno familiar, en el barrio, cerca y de calidad.

P.El nuevo convenio del Parque Central no ha logrado el aplauso en los barrios afectados, que exigen que las vías del tren se soterren en todo el casco urbano, como aprobó el Ayuntamiento.

R. Valencia había perdido el tren, y cuando el PSOE nos dejaba fuera de la alta velocidad. Por eso tuvimos que luchar desde el principio de mi alcaldía por el proyecto. Es una solución histórica, para más de 100 años. Está en información pública, por tanto, todo se puede estudiar. Lo que está claro es que mantenemos dos valores fundamentales del proyecto: que llega el AVE y pasa por debajo de toda la ciudad para salir por el norte, y la centralidad de la estación y el soterramiento de las vías, que no estaba planteado en aquel convenio que firmó Clementina Ródenas.

P. Los recursos contra la paralización de la prolongación de Blasco Ibáñez a través de El Cabanyal tardarán años en resolverse. ¿Desiste de su proyecto original?

R. No desisto de nada. La paralización es cautelar, y afecta al 2% de la globalidad del proyecto. Lo estamos ejecutando en la medida en que se han puesto en servicio dotaciones importantes para el barrio que son consecuencia de ese plan de regeneración de todo El Cabanyal. Incluso proponemos ampliar el ámbito del plan.

P. El centro histórico sigue salpicado de solares que le dan una imagen de zona bombardeada.

R. El centro histórico se caía cuando llegué a la alcaldía, no tenía ni planeamiento. Hoy goza de un convenio con la Generalitat firmado con Eduardo Zaplana en su momento por el que se están invirtiendo 40.000 millones de pesetas desde hace cinco años. Se han rehabilitado cantidad de plazas, calles, cientos de casas, se le está devolviendo la vida, y ayudando a los jóvenes, como nosotros hacemos, a comprarse una vivienda.

P. En cambio la recuperación de la muralla árabe se hará a costa de desalojar a cientos de vecinos. ¿No hay alternativas?

R. Este gobierno municipal, si algo hemos tenido como característica es la sensibilidad y la cercanía a todas las personas. Cuando se acomete una actuación, a lo mejor la solución no llega para todos, eso ha ocurrido desde el principio de los siglos. De lo que se trata es de intentar buscar las soluciones para la mayoría posible desde el interés general.

P. Tiene a gala la defensa de la huerta, pero La Punta se ha perdido. ¿Era un sacrificio necesario?

R. La ZAL, que es positiva para el futuro de los valencianos, para la economía y el Puerto, no se empezó con nosotros. La ZAL la firmé con [el ex presidente socialista de la Generalitat] Joan Lerma y Aurelio Martínez, cuando era consejero de Hacienda. Asumo mi responsabilidad desde entonces, cosa que no hacen los socialistas. Si algo ha hecho el Ayuntamiento, es trabajar por el realojo.