Wall Street induce a la baja

La renta variable española despidió la semana con moderados descensos en los principales indicadores. La mañana transcurrió tranquila en los mercados, a la espera de una serie de indicadores económicos en Estados Unidos que dieran nuevas pistas respecto a la marcha de la economía.

Los datos americanos fueron para todos los gustos, pero el mercado optó por quedarse con lo malo y cerrar el viernes con recogidas de beneficios. El negativo dato del PIB, con un ritmo de crecimiento del 1,6% y por debajo de lo esperado por el mercado, ensombreció la cifra positiva de la confianza del consumidor. El índice de confianza de la Universidad de Michigan fue 86, por encima de las previsiones de los analistas, pero no sirvió para animar la entrada de dinero. Los inversores se lo piensan mucho antes de tomar posiciones y ahora la atención se encuentra principalmente en como evolucione la economía en los próximos meses.

Muchos analistas consideran que lo peor ya ha pasado, pero llegado el momento y con los precios en ciertos niveles el papel sale rápidamente dispuesto a recoger cualquier plusvalía por mínima que sea.

La bolsa española fue la menos castigada de todas las europeas con un descenso en el índice general de Madrid del 0,55%. El Íbex 35 se dejó un 0,53%, cerró por debajo del soporte de los 6.500 puntos, y en la semana se dejó el 1,24% con lo que rompe la racha de tres semanas consecutivas de ganancias. En el resto de las plazas, París sufrió una pérdida del 1,25%, Londres se dejó el 0,74% y Francfort al ritmo de los descensos en Wall Street perdió cerca del 2%.

En una jornada sin apenas movimientos en los precios, el volumen de negocio también se resintió de forma importante con tan sólo 1.285 millones de euros en el mercado continuo.

En divisas, el euro marcó un cambio medio en 1,0973 dólares, pero por la tarde los datos de la economía americana provocaron una recuperación de la divisa europea que volvía a cotizar sobre los 1,1042 dólares.