Mas supedita los pactos con PP y PSOE a que acepten el nuevo Estatuto

"La reforma del Estatuto será la piedra de toque para cualquier negociación. No podrá haber pactos si no se cuenta con el nuevo Estatuto". Artur Mas avisó ayer una vez más al PP y al PSOE "con más de un año de antelación" de que no podrán contar con la colaboración de Convergència i Unió si no aceptan su propuesta de mayor autogobierno para Cataluña.

El conseller en cap de la Generalitat, acompañado del secretario general de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, se desplazó ayer a Madrid para presentar las bases de un nuevo Estatuto para Cataluña, que ya expuso el pasado 6 de abril en Barcelona.

Ante un auditorio compuesto principalmente por ciudadanos catalanes afincados en Madrid, Mas desgranó las razones que le han llevado a presentar su proyecto y los puntos más destacados del mismo. De las 180 butacas del Cine Estudio del Círculo de Bellas Artes, sólo dos estaban ocupadas por políticos ajenos a CiU: Rafael Arias-Salgado, ex ministro de Fomento y presidente de Carrefour, y el portavoz de Coalición Canaria en el Congreso, Luis Mardones.

El delfin del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, recordó que exactamente un año antes había acudido a Madrid para explicar una propuesta de mayor autogobierno basada en el estatuto vigente, pero decidió buscar ese objetivo por un camino distinto "en vista del proceso de estancamiento y de marcha atrás autonómica", ocurrido desde que el PP gobierna con mayoría absoluta. Mas advirtió una voluntad del PP de dar por concluido el proceso autónomico, "con el silencio cómplice del PSOE".

El dirigente nacionalista afirmó que su propuesta de nuevo Estatuto -que recoge aspectos como la competencia exclusiva, la administración única de la Generalitat en el territorio catalán o la presencia de Cataluña ante la Unión Europea- pretende "recuperar lo que pudo haber sido y no fue", ya que, según él, las reformas que propugna ahora por la vía de la reforma cabían "en la Constitución y en el Estatuto vigente".

"No es electoral"

Mas negó que su plan tenga un carácter "estrictamente" electoral, y lo comparó con la reforma del Estatuto defendida por el secreterio general del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Pasqual Maragall. "El PSC no puede asumir el liderazgo [de la reforma] por su condicionamiento al PSOE". Antes, Duran Lleida había señalado que "el plan de Maragall no tiene novedad alguna. Si la tuviera no contaría con el apoyo de Ferraz".

El conseller en cap se puso la venda antes de la herida al señalar que cree posible un acuerdo entre el PP y el PSOE para impedir la modificación del Estatuto. "Ya ocurre en el País Vasco", afirmó, aunque admitió que se trata de "un planteamiento distinto".

Mas apuntó también la necesidad de "blindar" el autogobierno y lograr que el desarrollo autonómico "no quede al albur de las circunstancias políticas de cada momento".