WorldCom logra el respaldo de los acreedores para salir de la quiebra
La compañía de telecomunicaciones WorldCom presentó ayer un plan de reestructuración con el que espera superar la mayor quiebra de la historia empresarial estadounidense -declarada en julio del pasado año- reduciendo su deuda de 41.000 millones de dólares hasta una cifra de entre 3.500 y 4.500 millones. El plan, que cuenta con el respaldo del 90% de los acreedores, fue presentado ante un tribunal de Nueva York, de cuya decisión depende ahora su puesta en marcha.
WorldCom no ha proporcionado aún detalles completos sobre el plan. No obstante, distintas fuentes apuntan que los titulares de bonos de WorldCom cobrarán unos 36 centavos por cada dólar invertido, que representan un valor total de 26.000 millones. Los acreedores de MCI, que poseían 3.000 millones de dólares en bonos, cobrarán 80 centavos por cada dólar invertido; los acreedores de Intermedia recibirán 94 centavos por dólar, en una inversión que representa unos 1.000 millones en bonos, mientras que los accionistas no cobrarán suma alguna.
El plan de reestructuración incluye el cambio de nombre de WorldCom a MCI, a secas, y el traslado de su sede en Clinton (Misisipí) a Ashburn (Virginia), en un intento de distanciarse de su antigua imagen y dirección. Robert Blakely ha sido nombrado gerente de Finanzas.