Las peticiones de adopciones internacionales se multiplican por 4,5 entre 1992 y 2002
Los procesos constituidos crecen un 157% desde el año 1997 hasta el ejercicio pasado
El descenso del número de niños susceptibles de ser adoptados en España y el incremento de la calidad de vida son algunos de los motivos que, según los expertos, están detrás del gran aumento que se ha producido a lo largo de los últimos 10 años tanto en solicitudes como en adopciones internacionales constituidas. De 1992 al año pasado, la suma de peticiones ha pasado de 145 a 667, con picos en los años 1995 y 1996 de 683 y 686 solicitudes, respectivamente, y de 811 en 2001. El crecimiento de adopciones efectivas también ha sido constante: de las 137 de 1997 se ha pasado a 352 en 2002.
El crecimiento "vertiginoso" de solicitudes de adopciones internacionales, como advierte en un informe la dirección general de la Familia, Menor y Adopciones de la Consejería de Bienestar Social, se debe a varios factores entre los que, señala el estudio, se encuentra la desaparición de la carga peyorativa "tradicionalmente asociada a la paternidad" adoptiva al haberse legitimado socialmente esta fórmula como forma de paternidad. Además, añade el incremento de la calidad de vida "que ha permitido plantearse a mucha gente este modelo de adopción" para conformar una familia o la mejora de la comunicación internacional "que ha facilitado cauces de contacto ágiles entre países geográficamente lejanos". A ellos suma el descenso del numero de niños y niñas que se encuentran en situación de poder ser adoptados en España. El resultado de la conjunción de estos factores es un incremento que se notó especialmente entre los años 1994 y 1995. Entonces, se pasó de 297 solicitudes a 683, y desde entonces la cifra de solicitudes nunca ha bajado del listón del medio millar.
Este crecimiento de las peticiones ha tenido su reflejo en el aumento de las adopciones constituidas. De las 137 de 1997 se pasó a 438 en 2000, 357 en 2001 y 352 en 2002. En esta evolución Bienestar Social apunta que en 2001 Rumanía dejo de realizar asignaciones -de niños con padres de adopción- lo que explica tanto el descenso que hubo este año, como el año pasado al haberse mantenido esta situación "en diferentes países". Junto a estos datos, la dirección general de la Familia elaboró en 2001 el documento El perfil psicosocial de la familia solicitante de adopción internacion
al, con información de los años 1997, 1998 y 1999. Estos son algunos de los datos más relevantes:
- Salario ligeramente superior a la media. Las familias solicitantes no cuentan con un nivel de ingresos muy distinto a la media, sino ligeramente superior. El salario medio en la Comunidad Valenciana en 1998 y 1999 fue de 14.202 y de 14.549,2 euros, mientras que el sueldo medio de las personas que solicitaron una adopción fue de 14894,6 y 15.090,6 euros para los mismos años. Además, el 50% de los solicitantes percibían ingresos de entre 3.000 y 9.000 euros.
- 40,8 años de edad. La edad de petición de acoger un menor de otro país es relativamente elevada, lo que, según apunta el documento sobre la adopción, "equivale a una etapa de estabilidad familiar y profesional". Con todo, ha disminuido ligeramente, al ser en 1997 superior a los 41,5 años, en 1998 estar en torno a los 40,4 años y en 1999 ligeramente por encima de los 40 años.
- 36,4% con estudios primarios. Las personas con estudios primarios son los que presentan mayores proporciones en términos absolutos (36,4%), aunque muy cerca está el conjunto de aquellos que tienen titulación universitaria media o superior (34,7%), de los que un 13,9 es media y el 20,8 superior. Un 0,1% era analfabeta, el 0,4% no tenía estudios y el 28,5% formación profesional o bachillerato.
- El 33,4% tiene un trabajo fijo por cuenta ajena. De los solicitantes, el grueso (33,4%) tiene un contrato fijo, el 19,2% es autónomo y el 19,2% es funcionario. Un 5,7% trabajaba de forma temporal, el 2% estaba en paro, el 1,8% era pensionista, el 16,4% era ama de casa mientras que el 0,5% tenía un contrato eventual.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.