Un libro denuncia las conexiones en la Red de los grupos ultra del fútbol
El periodista Antonio Salas ha publicado un libro, Diario de un skin, en el que denuncia el componente fascista de los grupos radicales que apoyan a los clubes de futbol españoles.
Antonio Salas explicó a la agencia Reuters que Internet ha cambiado el movimiento internacional neonazi, pues ha sido crucial para unificar a estos pequeños grupos.
Salas frecuentó los chats neonazis bajo el seudónimo de Tigre88. El número 88 es un código fascista para Heil Hitler, ya que es la repetición de la octava letra del alfabeto, la H.
El autor sitúa la aparición de grupos ultra en el fútbol español a mediados de la década de 1980, emulando el movimiento británico de holligans que creció en la de 1970. El fútbol, según el autor, es lo que da más visibilidad a estos movimientos neonazis porque las cámaras siempre están presentes en los estadios.
Salas denuncia la connivencia de los clubes con estos sectores radicales, a quienes facilitan entradas y algunos incluso llegan a facilitarles almacenes para sus banderolas y parafernalia de simbología fascista.
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