Pakito y Fitti, expulsados del juicio por el atentado al cuartel de Zaragoza
Los ex dirigentes de ETA Francisco Mujika Garmendia, Pakito, y José María Arregi Erostarbe, Fitti, fueron expulsados ayer de la sala de la Audiencia Nacional donde eran juzgados por su participación en el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Zaragoza en el que fallecieron 11 personas -5 de ellas, niñas- y otras 83 resultaron heridas. Era el tercer atentado más sanguinario de la historia de ETA tras la matanza de Hipercor, en Barcelona, y el atentado contra un autobús de guardias civiles en la plaza de la República Dominicana, en Madrid.
El fiscal pide para cada uno de ellos penas que suman 2.139 años, aunque ambos están condenados a más de 500 años y en ningún caso cumplirán más de 30.
Pakito y Fitti eran dos de los integrantes de la dirección de ETA, detenidos en 1992 en Bidart y están acusados de ordenar el atentado y proporcionar los explosivos al comando itinerante de la banda terrorista, que estaba integrado por los franceses Henri y Jon Parot, Jacques Esnal y Frederique Haramboure.
Tanto Pakito como Fitti se negaron a declarar y pidieron abandonar la sala, "por las buenas o por las malas", por lo que fueron expulsados. Henri Parot, ya condenado, declaró como testigo e intentó exculpar a sus compañeros.
