Abre una sala de arte en la Alpujarra para dar cabida a los artistas residentes
La nueva sala de exposiciones inaugurada en Órgiva, en la Alpujarra granadina, se llama La Manzanilla y nació hace alrededor de un mes mitad por azar, mitad por necesidad. El abogado Miguel Ruiz de Almodóvar había abierto una tienda de artículos de artesanía fabricados en la comarca granadina, pero una veintena de pintores extranjeros, todos ellos alpujarreños de adopción, lo convenció para que dedicara un espacio para exponer una conjunto de obras que deberían haber colgado en otro lugar.
Ruiz de Almodóvar accedió y superada la urgencia, y tras comprobar el interés que despertó la muestra de pintura. arquitectura y cerámica, La Manzanilla ya tiene un programa estable de exposiciones. El pasado viernes, coincidiendo con la entrada de la primavera y la celebración de la primera jornada de la controvertida y pacífica Fiesta del Dragón, que ha reunido a varios miles de personas en un paraje situado a un par de kilómetros del centro del pueblo, donde esta ubicada la pequeña galería, La Mazanilla abrió su segunda exposición, una antológica de Paul Robert, un artista vinculado a la tierra y empeñado desde hace tiempo en llevar al lienzo los pormenores plásticos de la primavera alpujarreña.