El Gobierno responsabilizará al PSOE si hay "hechos graves" en las manifestaciones

El Gobierno se adelantó ayer a responsabilizar al PSOE e IU si se producen incidentes graves en las manifestaciones contra la guerra y alertó de la "posibilidad de que en cualquier momento se genere algún acontecimiento de mayor importancia". El vicepresidente primero, Mariano Rajoy, exigió al líder del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, que condene la actuación de los grupos violentos y respalde públicamente a las Fuerzas de Seguridad. Zapatero respondió que el Gobierno "debe gestionar el derecho de manifestación y no eludir su responsabilidad con mentiras e insidias".

El ministro del Interior, Angel Acebes, compareció, tras la reunión del Gabinete de Crisis, para dar a conocer el informe sobre la situación del orden público que presentó en la sesión. Fue el apartado al que más tiempo dedicó el Gabinete y refleja el grado de preocupación gubernamental por el gran descontento popular.Acebes señaló que en los dos últimos días "se han detectado minorías violentas organizadas que utilizan las manifestaciones para alterar la seguridad ciudadana y crean situaciones de riesgo desde manifestaciones ilegales, que se realizan sin autorización alguna". El ministro no vinculó estos grupos a ninguna sigla.

La tesis del Gobierno, presentada por Rajoy, es que no existe un rechazo absoluto a su política sino que se ha producido una "mayor actividad de los grupos radicales". "Es cierto que existe una inmensa mayoría de españoles en contra de la guerra, pero esos mismos ciudadanos quieren que se cumpla la legalidad internacional y que la intervención dure lo menos posible".

Acebes aclaró que el Gobierno iba a evitar que las "minorías violentas corten las calles, apedreen sedes de partidos, quemen contenedores e insulten y amenacen a las Fuerzas de Seguridad". No sólo rechazó que hubiera habido excesos policiales estos dos últimos días sino que defendió rotundamente la actuación policial, que calificó de "proporcionada". Precisó que en los incidentes de la noche del viernes los policías fueron "insultados y agredidos y cinco de ellos contusionados". Practicaron cuatro detenciones, dos por agresiones a la policía y otras dos por quema de contenedores.

Tras indicar que los "grupos violentos" no han provocado "ningún incidente especialmente grave" alertó de la posibilidad de que "en cualquier momento generen situaciones de riesgo que desemboquen en algún acontecimiento de mayor importancia".

Llegado a este punto, intervino el vicepresidente primero, Mariano Rajoy, quien vinculó las actuaciones violentas con la "actitud de denuncia permanente" y la "falta de consenso" del PSOE". "Asistimos a un sinfín de actuaciones violentas que nada tienen que ver con la manifestación política y por eso un partido que es la alternativa de Gobierno no puede estar instalado en la denuncia en la calle".

De ahí que Rajoy exigiera a Rodríguez Zapatero una condena expresa de la actuación de los grupos violentos y un respaldo público a las Fuerzas de Seguridad.

No tuvo especial interés el líder socialista en responder a estas acusaciones al considerar "increíble" tener que enredarse en esas "falsedades" del Gobierno cuando "los misiles no dejan de caer", dijo a sus colaboradores. Pero después algo dijo.

"Ejemplo de civismo"

Zapatero elogió "el ejemplo de civismo" que han dado los españoles en todas las manifestaciones que ha habido hasta ahora. "El Gobierno tiene la responsabilidad de gestionar bien el derecho de manifestación y la seguridad de los ciudadanos y no utilizar la mentira y la insidia contra los partidos", añadió.

Pero será hoy en el comité federal socialista cuando sus miembros se extiendan más sobre esta materia, habida cuenta del enojo que existe por las acusaciones del Gobierno. De entrada existe ya un borrador que dice: "El Gobierno quiere responsabilizar al PSOE de actos minoritarios que rechazamos. Mienten y lo saben". Zapatero ha requerido la presencia de Acebes en el Congreso para que explique las cargas policiales.. A la sede socialista empiezan a llegar testimonios verbales y gráficos de esas actuaciones.