Un niño halla estrangulada a su madre y colgado a su compañero en Murcia
Un niño de 10 años encontró ayer por la tarde el cadáver de su madre muerta en la cama de la habitación del domicilio familiar en Molina de Segura (Murcia) y el del compañero sentimental de ésta ahorcado en otra sala de la vivienda. Fuentes de la policía y varios testimonios de los vecinos aseguran que la pareja había protagonizado diversas peleas pese a llevar varios meses viviendo separados. La Delegación del Gobierno de Murcia cree que se trata de un caso de violencia doméstica y que el fallecido se suicidó tras estrangular a la mujer.
Los muertos son Inmaculada C.M., de 28 años y Luis Julio S.T., de 44, con el que había convivido durante dos años y que se ahorcó utilizando cuerdas de escalada. Según la policía, fue el menor -hijo de una relación anterior de C.M.- quien, tras hallar los cadáveres al regresar del colegio, alertó a los agentes de los sucedido. Una patrulla policial se dirigió al lugar de los hechos donde comprobó el relato del niño.
Según los primeras investigaciones policiales, la mujer presentaba síntomas de estrangulamiento ya que tenía en el cuello las hendiduras de los dedos de la mano del agresor. El hombre tenía un arañazo en el rostro mientras de lo que se desprende que la víctima opuso resistencia al atacante.
La policía cree que, tras asfixiar a C.M., el hombre se fue a la habitación contigua donde tenía todo preparado para ahorcarse, ya que con el cadáver había dos trozos de cuerda, uno con el que se ató las manos hacia atrás y otro colgado de un gancho en el techo a modo de una horca. El hombre se colocó sobre unos bafles y luego se ahorcó.
Miedo y amenazas
Una amiga de la fallecida aseguró ayer que C.M. le había asegurado que había decidido separarse de Luis Julio S. T. por las amenazas que había recibido de éste y que, recientemente, su temor ante las posibles represalias de su ex compañero habían subido de tono hasta el punto de que, el pasado viernes, éste le había ofrecido a la fallecida y su hijo pasar la noche en su casa.
Fuentes policiales, confirmaron que hace menos de un mes, una patrulla de la Policía Nacional había acudido al domicilio de la víctima alertados por un conocido de C.M. que había denunciado que la mujer estaba siendo víctima de malos tratos. Cuando los agentes llegaron a la vivienda, la mujer explicó que ya no pasaba nada, que ella y el presunto agresor llevaban dos años de relaciones y que el hombre se había alterado porque ella le dijo que iban a romper, pero que ya estaba más tranquilo. Los agentes le recomendaron que aún así presentara denuncia a lo que la mujer desistió, si bien la policía puso en conocimiento los hechos de los juzgados de Molina.
Vecinos de la fallecida también declararon ayer haber oído la tarde de los hechos una discusión en el inmueble.
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