Francia reconoce que ha superado el 3% de déficit público en 2002

El primer ministro francés, Jean Pierre Raffarin, admitió ayer que es "probable" que el déficit público correspondiente a 2002 supere el umbral del 3% del PIB marcado como límite por el Pacto de Estabilidad europeo. La incertidumbre internacional, el retraso de las reformas gubernamentales y las decisiones del Gobierno de Jospin (ley de las 35 horas, ley de modernización social) son, según Raffarin, las razones que han llevado a alcanzar ese límite fijado para los países del euro.

La Comisión Europea ya lanzó en enero una advertencia al Gobierno francés para que no superara el 3% de déficit público. Ayer, la Comisión insistió en que se verá obligada a abrir un procedimiento de infracción si se confirman las previsiones de Raffarin, según indicó un portavoz. Las cifras relativas a 2002 se presentarán a primeros de marzo y será entonces cuando la Comisión decida si abre el procedimiento en función de los datos. En la actualidad, Alemania y Portugal están en esta situación.

El presidente del grupo parlamentario que apoya al Gobierno, Jacques Barrot, abogó ayer por una flexibilización del Pacto de Estabilidad para que Francia no se exponga a posibles sanciones, que alcanzarían hasta el 0,5% del PIB. Barrot ha propuesto que se "examine un acuerdo que permita ayudar a los países sacudidos por la crisis a superar este periodo".

A pesar de haber superado el umbral permitido, el primer ministro francés excluyó ayer de forma categórica la imposición por parte del Gobierno de un plan de rigor económico, que "conduciría a una mayor depresión de la coyuntura". El Ejecutivo ha optado por aceptar un déficit mayor para hacer frente a la desaceleración económica, a la subida del paro y a las consecuencias económicas de una guerra en Irak.

El primer ministro declaró ayer que el objetivo de alcanzar un crecimiento del 2,5% marcado por los presupuestos de 2003 "es inalcanzable". Afirmó también la necesidad de una "política presupuestaria más responsable". Pese a ello, la bajada de un 30% de los impuestos prometida por el presidente de la República para toda la legislatura -que termina en 2007- no ha sido puesta en cuestión.

Los precios suben un 0,2%

Por otro lado, en enero, con una subida de 0,2% con respecto a diciembre y de 2% en relación a las mismas fechas del año pasado, tres décimas menos que en enero, se puede decir que no hay tensiones inflacionistas en la economía francesa. Esto se debe, de acuerdo con las cifras oficiales, al periodo de rebajas del primer mes del año (caída del 7,7% en el precio de la ropa y el calzado), al final del efecto euro y al fortalecimiento de la moneda europea frente al dólar, y pese al aumento de los precios de la energía.