A LA FUERZA, MAR ADENTRO.

Desde las primeras horas del accidente del Prestige, las autoridades de Fomento decidieron alejarlo de la costa; pese a que su versión oficial explica que ordenaron el alejamiento tras oír el informe del inspector marítimo, que subió al barco 19 horas después del accidente, la decisión a esa hora estaba tomada. Lo prueba el fax de Sasemar enviado a las 20.30 del 13 de noviembre al armador del Prestige para que el Ría de Vigo mantenga al barco fuera de la costa española. Más de 24 horas después, los responsables del salvamento del petrolero se comprometieron por escrito con el Gobierno a llevarlo a más de 120 millas de las costas gallegas.