Empate sin chispa entre el Mallorca y el Athletic
El irregular Mallorca de Gregorio Manzano se presenta cada jornada con una nueva e improvisada alineación, no por capricho o decisión técnica del entrenador jiennense, sino como resultado de las continuas lesiones y sanciones que han venido sacudiendo a los baleares a lo largo de toda la temporada.
El Athletic mostró su lado más fiero con un inicio de partido eléctrico y se puso por delante en el minuto cinco, merced a un cabezazo de Santi Ezquerro a pase de Javi González.
El encuentro se dibujaba duro y ofrecía en sus primeros minutos un fútbol de contacto. Los de Manzano acertaron a hacerse con el dominio del balón y encadenaron una buena serie de ocasiones, incluido un gol anulado a Robles por fuera de juego de Niño. El empate llegó en el minuto 22. El propio Robles se resarció de la acción anterior superando, a la media vuelta y desde el área pequeña, la estirada de Aranzubia.
MALLORCA 1 - ATHLETIC 1
Mallorca: Leo Franco; Campano, Vicente, Niño (M. Soler, min. 48); Cortés, Novo, Marcos, Robles (Turu Flores, min. 76); Ibagaza, Eto'o (Biagini, min. 81); y Pandiani. Athletic: Aranzubia; Javi González, Prieto, Aitor Ocio, Del Horno; Óscar Vales, Alkiza; Etxeberria, Tiko (Felipe, min. 82), Arriaga (Aduritz, min. 65); y Ezkerro (César, min. 91). Goles: 0-1. M. 5. Ezquerro, libre de marca en el segundo palo, cabecea a la red un pase de Javi González. 1-1. M. 22. Robles, en el área pequeña, bate a Aranzubia a la media vuelta tras un saque de banda de Campano. Árbitro: Rodríguez Santiago. Mostró amarillas a Eto'o, Aitor Ocio y Felipe. 18.000 espectadores en Son Moix. Miquel Soler cumplió su partido número 500 en Primera.
Ibagaza, recolocado en la banda izquierda, supo hallar la conexión con Pandiani. Pero los de Heynckes no le habían perdido la cara al partido. El Athletic, tras unos compases de zozobra, acabó por reencontrarse en el terreno de juego. Tiko, a balón parado, y Ezquerro, aprovechando su punta de velocidad, inquietaron la portería balear antes del descanso.
El vibrante ritmo del juego decayó en el segundo tiempo. Miquel Soler salió en sustitución del lesionado Fernando Niño y la defensa del Mallorca se reorganizó de nuevo, con Poli como central de circunstancias.
El juego deslabazado de ambos equipos no encontraba el premio de un gol que desequilibrase el marcador. Ezquerro, verdadera punta de lanza de los bilbaínos ayer, daba la impresión de sentirse desasistido en su labor ofensiva. Los cambios ofensivos del Mallorca -Biagini y Turu Flores- no aportaron nada al partido.
El empate fue un balance final justo para tanto desacierto voluntarioso. El encuentro queda para la historia como el número 500 en la extensa trayectoria del veterano Miquel Soler en Primera División. Excluidos los porteros, a Soler sólo le superan en la clasificación histórica Eusebio (543) y Sanchis (524).
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