Sevilla vive una de las marchas más multitudinarias de su historia

Entre 460.000 personas, según la Delegación del Gobierno y las policías locales, y 669.000, según los convocantes, salieron ayer a la calle en Andalucía para gritar a favor de la paz. Las proclamas se repitieron en 12 ciudades. La mayor concentración se registró en Sevilla: fue una de las más numerosas en la historia de esta comunidad, más de 200.000 personas. A ella se sumó el presidente de la Junta, Manuel Chaves.

El éxito de la movilización de Sevilla desbordó incluso las previsiones del Foro Social, la organización convocante de la protesta, que cifró la asistencia en 250.000 personas, mientras que la Delegación del Gobierno de Andalucía rebajó hasta 100.000 las estimaciones.

La cifra aproximada de participantes en la protesta en la capital andaluza rondó los 200.000 (a razón de tres personas por metro cuadrado), teniendo en cuenta la superficie ocupada desde la cabecera, cuando llegó al final del itinerario, y la cola de la protesta. La superficie total del itinerario de esta marcha era de 102.674 metros cuadrados, desde la plaza Nueva hasta la plaza de España, donde se encuentra la sede de la Delegación del Gobierno, junto a la que artistas como María Galiana, Benito Zambrano, Cristina Hoyos y Salvador Távora leyeron el manifiesto.

La protesta, secundada por todos los partidos excepto el PP, los sindicatos y decenas de organizaciones sociales, transcurrió sin incidentes y con escasa presencia policial, salvo dos furgones que custodiaban la fachada de la sede del PP, blanco de las iras de anteriores protestas, como atestiguan los cristales rotos de sus balcones. Un joven fue detenido por agredir a un policía.

La participación ciudadana desbordó también las previsiones de las 50 organizaciones sociales, políticas y sindicales que convocaron la marcha en otras ciudades andaluzas, como Granada (150.000) y Córdoba (75.000), según datos coincidentes de las policías locales y los convocantes, y Málaga. En esta última plaza el Gobierno Civil cifró en 30.000 los asistentes, mientras que los organizadores aseguraron que se habían superado "con creces" los 50.000.