Derribo de chabolas deshabitadas
El Ayuntamiento de Sevilla comenzó este fin de semana a derribar las chabolas abandonadas del asentamiento rumano establecido bajo un puente cercano a la capital andaluza. El Ayuntamiento procedió al derribo tras la autorización de la Delegación del Gobierno, organismo encargado de controlar las chozas identificadas como abandonadas. Según los cálculos de la Administración, entre el 50% y el 60% de las chabolas están deshabitadas. En el asentamiento permanecen más de una veintena de rumanos regularizados.
La Delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento explicó tras las primeras intervenciones en el asentamiento que, aunque el gobierno local no tiene competencia en esa materia, entienden que no hace falta una orden judicial para esta actuación. La operación, tal y como se había advertido, se realizó sin un anuncio previo para evitar que fueran ocupadas por otros inmigrantes.
El Ayuntamiento insistió en que los derribos sólo han afectado a las chabolas deshabitadas y que, como ya anunció, no se ha esperado al desalojo total del asentamiento. El Ayuntamiento ha albergado a 19 habitantes de este núcleo.