El City Center de Nueva York se rinde ante el baile flamenco
Manolete, Canales, Amaya y Farruquito, en el Festival Flamenco USA
La gente salió taconeando del City Center de Nueva York y con botellitas de aceite de oliva virgen extra andaluz en la mano. Manolete, Antonio Canales, Juana Amaya, Farruquito y Farruco compartieron la noche del jueves, durante dos horas, el escenario del teatro neoyorquino en la denominada Gala de Andalucía, el primer espectáculo que se celebra en esta ciudad dentro de la tercera edición del Festival Flamenco USA, al que las ediciones dominicales de The New York Times y The Washington Post dedicaron amplios espacios.
Ciclo Brahms
Orquesta del Concertgebow (Amsterdam). Director: R. Chailly. Auditorio Alfredo Kraus. Las Palmas de Gran Canaria. 29 y 30 de enero.
Fueron cinco estilos y generaciones diferentes, más una breve participación de Manuel Soler, que cautivaron a un público que días antes había agotado las 2.600 localidades del aforo para ver bailar por soléa, martinete por siguiriya, guajiras y alegrías. Horas antes de la actuación, los bailaores reconocieron que un espectáculo así es imposible organizarlo en España no tanto por el caché de los artistas, sino por el marcado individualismo que domina el mundo del flamenco y por la falta de empresarios.
La campaña de lanzamiento en Estados Unidos del aceite de oliva andaluz, patrocinada por la Junta de Andalucía y las empresas del sector, ha sido la que ha hecho posible reunir en un mismo escenario a cinco bailaores en un espectáculo en el que el triunfador de la noche fue Manolete. El bailaor granadino, que, según dijo, era "un poquito más mayor" que sus compañeros -43 años le separan de Farruco, el benjamín del grupo-, puso en pie al público bailando con la sobriedad que le caracteriza por alegrías.
Si alguien pensaba que el público neoyorquino, que interrumpió con aplausos en más de una treintena de ocasiones las actuaciones, iba a preferir lo fácil, se equivocó. Al término de la gala todos terminaron bailando salsa y flamenco en una sala de cuatro plantas próxima a Times Square, en la que ya muy entrada la madrugada los encargados del local tuvieron que poner fin al improvisado tablao montado por los flamencos.
La tercera edición del Festival Flamenco USA recorrerá un total de 11 ciudades, frente a las seis del año anterior. Esto es posible gracias al productor Miguel Marín, un cordobés de Carcabuey que vino a estudiar Económicas a Estados Unidos y que vive con un pie en la ciudad de los rascacielos y otro en España. En 2001, Marín montó prácticamente solo el certamen que en los años posteriores ha contado ya con patrocinadores.
Este año se prevé que unas 45.000 personas acudan a los 35 conciertos organizados -en los que participan, entre otros, Sara Baras, Tomatito, Chano Domínguez y Arcángel-, frente a las 25.000 que acudieron a la edición anterior. El festival comprende también clases de flamenco impartidas a 2.700 escolares neoyorquinos, conferencias -el director teatral Lluís Pascual tenía previsto ayer hablar de García Lorca y el flamenco- y clases magistrales, entre otros de Manolete, Canales y Farruquito. Sara Baras, que arrolló a principios de la semana en Washington con su Mariana Pineda, tenía previsto anoche (madrugada en España) actuar en el City Center, que también agotó sus localidades.
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