Una justicia sólo regular

Los abogados han examinado el estado de la administración de justicia en la provincia de Valencia y el resultado de la prueba ha sido de regular. Los que no llegan siquiera al aprobado son los juzgados de lo Civil (Primera Instancia) y los de Instrucción, básicamente por falta de medios, retraso en las actuaciones judiciales y poca agilidad al celebrarlas, insuficiente accesibilidad y disponibilidad de jueces y secretarios, pocos juzgados y una calidad en las sentencias que, de cero a diez, está en 4,4 puntos.

El Colegio de Abogados de Valencia encargó a una empresa especializada en encuestas telefónicas un estudio sobre el estado de la administración de justicia. Los datos obtenidos son el resultado de conversaciones durante 20 minutos con 624 abogados entre el 20 de noviembre y el 5 de diciembre de 2002 -la condición imprescindible para poder opinar era estar en activo y haber tenido al menos 20 casos en el último año-. La media de edad está en 38 años, el 55% del universo son hombres, su residencia laboral está en la provincia de Valencia y el margen de error en las conclusiones extraídas está alrededor del 4,1%.

Escasa accesibilidad de jueces y poca celeridad de las actuaciones, males comunes

El área social, que dirime, entre otros, conflictos laborales, logra una nota de 5,1. El 30% de los abogados puntúa esos juzgados por debajo de cuatro. Sólo las salas de lo Social del Tribunal Supremo superan el cinco. Las del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y de la Audiencia suspenden con un 4,6 y un 4,7, respectivamente. Los letrados destacan en negativo la puntualidad en la celebración de las actuaciones judiciales, la accesibilidad y disponibilidad de jueces, magistrados y secretarios, y la agilidad en la celebración de las actuaciones judiciales.

Los juzgados de lo Penal no pasan el cinco, y en la escala superior los mejor valorados son los del TSJ. A los defectos que los letrados señalan en el área penal se añade un 4,8 de valoración sobre 10 puntos en respeto de los derechos y garantías de las partes, lo que ayer fue señalado con especial preocupación por el decano del Colegio de Abogados de Valencia, Luis Miguel Romero Villafranca, quien indicó que "la razón está seguramente en una cuestión cultural de protección sin distinción de víctima y verdugo".

La administración de justicia en materia civil también está por debajo del cinco, tiene una media del 4,4 según el estudio. La peor puntuación se la llevan los juzgados en celeridad y agilidad en la celebración de las actuaciones judiciales, un 4,2. La mejor es para las salas de lo Civil en adecuación de su actuación en lo procesal, un 6,6.

En materia de contencioso-administativo, que de media alcanza el 5,1, los mejor valorados son los juzgados, con un 6. Pero por debajo del aprobado, con un 4,6, se quedan las salas de la Audiencia, las del TSJ y del Tribunal Supremo. Todos los parámetros están sobre cinco en los juzgados -alguno de ellos con un 6,5, como es el que se refiere a puntualidad en la celebración de las actuaciones-, pero en las salas sólo dos de cinco, el más bajo de ellos (3,3) en celeridad y agilidad en los procesos.

Los letrados que han participado en el estudio han señalado como muy preocupante la diferencia de interpretación de normas procesales -por ejemplo si cabe o no recurso y cuál, que varía según la sala-. En materia civil lo aprecia el 83% de los entrevistados, en penal el 73,4%, en social el 61,4% y en contencioso el 53,1. En todos los casos, los abogados lo consideran malo para la Administración de Justicia. En cuanto a la interpretación de las normas, el 92% de los encuestados aprecia que ocurre en Civil, el 84,2% en Penal, el 88,6 en Social y el 66,7% en Contencioso, práctica valorada con media de 3,7.