Madrid gana la primera carrera

No hubo sorpresas. Madrid será la candidata española a los Juegos Olímpicos de 2012. Las dudas que pudieron ensombrecer su triunfo en la recta final se despejaron en la mañana de ayer en el Palacio de Congresos y Exposiciones de La Castellana en la votación del COE. La fuerza y el peso de la capital, que tendrá futuro, aunque difícil, en la compleja carrera olímpica, se impuso con cierta amplitud (157 votos contra 103) a la perseverancia sevillana, que no podrá ofrecer nunca un perfil tan potente ante el alto tribunal del COI.

Fue un triunfo de Madrid políticamente correcto porque tampoco resultó humillante para Sevilla, que cayó derrotada, pero de forma digna, como advirtieron varios miembros influyentes del COE. Se lo tendrá que agradecer a unos discutibles votos de federaciones no olímpicas, que aún tienen un peso excesivo sin tener nada directo que cortar en situaciones así, pero que también formen parte del deporte español. El doble de federaciones olímpicas (18-9) se decantaron por Madrid (90-45 en votos, al tener cinco cada una). Y los miembros a título individual, la mayoría de procedencia olímpica, también votaron para la vencedora (37-12).

Fue la clave, porque en la votación olímpica más importante de la historia del deporte español, la primera vez que se enfrentaban dos candidaturas para elegir una, las federaciones no olímpicas se decantaron justamente por la vencida. Entre las reconocidas por el COI, 12 votaron a favor de Sevilla y 8 en contra (36-24 en votos, al tener tres cada una); entre las no reconocidas, 5 de ocho (10-6 en votos, al contar con dos). El gran detalle entre éstas fue que el presidente de Colombofilia votó en blanco. Se unió así a José María Echevarría, el presidente del COE, y Feliciano Mayoral, ex secretario y ahora director general de la candidatura de Madrid, que se abstuvieron. Como habitualmente no vota, Juan Antonio Samaranch ni viajó a Madrid. Tampoco estuvo el secretario de Estado, Juan Antonio Gómez Angulo.

La espantada de Arantxa

Otros ausentes fueron los representantes del Comité Paralímpico, José María Arroyo, y del Ministerio de Exteriores, Julio Núñez. De las dos bajas restantes, no hubo referencia a la de Isidro Oliveras, representante español en la Federación Internacional de Patinaje, pero sí a la sorprendente de Arantxa Sánchez Vicario, elegida recientemente como deportista olímpica. Ni Agustí Pujol, presidente de la Federación Española de Tenis, ni Joan Margets, vicepresidente de la Internacional, lo entendían. "Ahora que está retirada y en la ocasión más importante que tenía no se presenta", comentaron al unísono.

Echevarría, en la presentación matinal, dijo una frase memorable para quedar bien: "Hoy no se consigue nada y nadie gana ni pierde". Hacía referencia a que para la ganadora empezaba de verdad la carrera internacional. Pero ayer sí que hubo una vencedora y una perdedora. Se notó desde poco antes de las nueve y media de la mañana, cuando la simple entrada del alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano en el Palacio de Congresos causó una avalancha de cámaras y la de Ignacio del Río, consejero delegado, y Feliciano Mayoral, casi arrolla al edil sevillano, Alfredo Sánchez Monteseirín. Cuando poco antes de entrar en la sala del juicio la delegación andaluza se hacía la foto de recuerdo en unas escaleras, ya parecía el equipo pequeño que iba a jugar en el cercano Bernabéu. Sólo podía aspirar a la sorpresa y, de hecho, únicamente la brillante intervención de su presidente adjunto, Alfonso Seoane, pareció levantar los ánimos. Volvió a hacer hincapié en las bondades de una ciudad pequeña, habitable, una alternativa que puede encantar, pero que no parece viable en ese foro, como ya se ha demostrado en sus dos fallos anteriores ante el COI. Pero tanto él como el alcalde volvieron a recalcar que, independientemente del resultado, Sevilla seguirá aspirando a los Juegos en el futuro.

Madrid, que incluso se pasó de tiempo en los 45 minutos previstos para cada intervención, vendió su producto, de mayor envergadura, tratando de hacerlo más accesible, más humano. Tuvo especial cuidado en señalar que no es un proyecto personal, sino de toda la ciudad (Álvarez del Manzano); que la cercanía de las instalaciones y la proximidad gracias a buenos sistemas de transportes harán de la ciudad un modelo atractivo (Del Río) y que la candidatura se ha hecho fuerte basándose en lo que gusta en el COI según su experiencia (Mayoral). Y, aunque en todo momento dejó caer el peso de la capital, quizá en exceso, como contraposición a su rival, supo añadir un vídeo final entrañable, de los que siempre resultan emocionantes a los miembros. En él se recogen los apoyos de numerosos deportistas y ex deportistas junto a jóvenes promesas bajo el lema Yo también estaré allí: Santana, Nieto, Miriam Blasco, Raúl, Fernando Torres, Casillas, Felipe Reyes, Azofra, Guijosa, Roncero..., entre otros. Poco antes, en directo, habían pedido a los miembros del COE su apoyo Alberto García y Natalia Via-Dufresne, la mejor sorpresa. La presencia de la regatista catalana, plata en 1992, es un símbolo de la cura de humildad madrileña: tras digerir el triunfo de Barcelona 92, tiene una relación magnífica con la capital catalana y está recurriendo incluso a técnicos que trabajaron allí.

El secreto del voto y la diplomacia fueron totales en casi todos los miembros, aunque en algunos se dejaba entrever la lógica del resultado. "Ya se ha elegido cuál es y ahora hay que apoyar a la que es", dijo Iñaki Urdangarín. "Ha sido un trámite, desagradable para Sevilla, pero hemos escogido una ciudad y ahora hay que trabajar con este equipo. La filosofía que tiene Madrid, la de aglutinar detrás a todas las personas del deporte, es positivo". Miguel Indurain fue algo más allá: "Madrid quizá tenga más posibilidad de luchar con ciudades grandes como Nueva York o París.". Pero quizá lo más significativo lo resumió Manel Estiarte, miembro del COI y que ya vivió Barcelona 92 como el mejor waterpolista del mundo: "Lo ideal para seguir soñando", dijo. Y él puede echar alguna mano en el sueño.