Portabella reclama a Clos que destine más dinero a ayudas a la rehabilitación

El tercer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona y presidente del Instituto Municipal del Paisaje Urbano y la Calidad de Vida, Jordi Portabella, pidió ayer al alcalde, Joan Clos, que aumente el presupuesto de este organismo con el fin de incrementar las subvenciones que otorga para la rehabilitación de viviendas y edificios. Además Portabella propuso que el Ayuntamiento solicite a la Generalitat que todos los distritos de Barcelona cuenten con un área de rehabilitación, lo que permitiría a los cascos antiguos de la ciudad optar a las ayudas ordinarias del plan de vivienda de la Administración autonómica.

La petición formulada ayer por Portabella fue una clara réplica al alcalde, cinco días después de que éste reclamara más ayudas para la rehabilitación al Ministerio de Fomento. Y por si quedaba alguna duda, fue también una muestra más de que la política de vivienda va a ser uno de los caballos de batalla de la campaña electoral.

En concreto, Portabella reclamó a Clos "aumentar las subvenciones del Instituto Municipal del Paisaje Urbano el 5% para conseguir que las ayudas cubran de media el 25% del coste de las obras de reforma". Según la propuesta de Portabella, este aumento supone destinar a rehabilitación 25 millones de euros durante el periodo 2002-2005, cantidad que el concejal equiparó al 1% del ahorro corriente del Ayuntamiento.

Durante el actual mandato, el consistorio ha destinado a las subvenciones para rehabilitación 16,3 millones de euros, el triple que en el anterior mandato, con los que el Instituto Municipal del Paisaje Urbano ha intervenido en el 8% del parque de edificios de Barcelona. En concreto, el organismo municipal ha realizado unas 10.000 actuaciones, de las que 6.752 han sido rehabilitaciones de fachadas y 1.311 reformas en edificios, como la eliminación de barreras arquitectónicas, aislamientos térmicos y restauración de escaleras, lo que Portabella denominó "rehabilitación de carácter social".

Portabella se mostró partidario de la rehabilitación como una de las "tres patas de la política de vivienda social", junto con la construcción de viviendas nuevas y el fomento de un parque rotatorio de pisos de alquiler, y aseguró que las medidas propuestas ayer persiguen "dotar a la rehabilitación de un marco equilibrado en relación con la compra y el alquiler".

En opinión de Portabella, una de las claves de este equilibrio es que todos los distritos de Barcelona cuenten con zonas calificadas por la Generalitat como áreas de rehabilitación (AR). En este sentido, el tercer teniente de alcalde mostró su discrepancia con Clos, quien la semana pasado abogó por solicitar para los cascos antiguos la calificación de áreas de rehabilitación integral (ARI).

Ambas calificaciones se solicitan a la Generalitat, pero según explicó Portabella la diferencia está en el tipo de subvenciones a las que pueden optar unas y otras zonas. Mientras que las AR pueden solicitar ayudas para cinco años con cargo a fondos ordinarios de la Generalitat, las ARI optan a ayudas de Fomento que corresponden a partidas extraordinarias y se adjudican cada tres años. "La solución no es ir a trompicones, sino vehicular las ayudas en partidas ordinarias", concluyó Portabella.