_
_
_
_
Reportaje:

Detectives medioambientales

Niños de 10 municipios de la sierra oeste aprenden a defender la naturaleza en compañía de sus abuelos

Mábel Galaz

Israel, Aziza y Rocío tienen 11 años. Los tres estudian el tercer ciclo de primaria en el colegio público de Chapineria. Los tres se presentan orgullosos como "detectives medioambientales". Cuentan que hasta el mes de octubre no supieron con tantos datos que "la tierra está en peligro" y que "el desarrollo sostenible es necesario para evitar la degradación de la naturaleza". Desde que sus profesores les hablaron del proyecto de Agenda 21 Escolar de la Consejería de Medio Ambiente, Israel, Aziza y Rocío, y el resto de sus compañeros de clase, conocen, por ejemplo, la importancia de las tres erres: reducir, reutilizar y reciclar. También saben que su pueblo se ha visto afectado por el desarrollo incontrolado. Se lo cuentan cada viernes sus abuelos en el proyecto -Félix, Jesús, Chiqui y Conrado-. Niños y abuelos de 10 municipios de la sierra oeste de la región -Cadalso de los Vidrios, Cenicientos, Chapinería, Fresnedillas de la Oliva, Navas del Rey, Robledo de Chavela, Villa del Prado, Villamanta y San Martín de Valdeiglesias- trabajan para impulsar el desarrollo sostenible en el entorno rural. Todos se reunieron ayer para poner en común sus trabajos y comprometerse en seguir trabajando por el medio ambiente.

Un consejo de mayores asesora a los chavales sobre cómo cuidar sus pueblos

"Yo quiero cuidar la naturaleza para que mis hijos puedan disfrutar de ella", dice Rocío con una seguridad aplastante. "Y para eso debemos tener cuidado en no hacerle daño". Los monitores del proyecto de Agenda 21 Escolar y los abuelos le han contando a Rocío y a sus compañeros, las acciones que pueden adoptar para contribuir al desarrollo sostenible. "Nos ponen ejemplos como el de las judías", cuenta Rocío. "Nos enseñan un bote de judías blancas, luego otras sueltas y nos explican que es mejor comprarlas sueltas porque evitamos el bote". "Yo a mi madre", dice Israel, "le he pedido que cuando me compre plátanos sean de esos que no van en bandeja para así tener menos basura".

Sus abuelos del proyecto les hablan de que hace años no había tanta basura como ahora. "Les ponemos ejemplos sencillos para que ellos entiendan el mensaje a favor de la naturaleza que les queremos transmitir", relata Julio. "Así les hemos contado que la fruta antes nos la empaquetaban en papel de ese gris algo gordo, que nosotros luego utilizabamos para encender el fuego".

Abuelos y niños se han convertido en agentes medioambientales que realizan estudios sobre los problemas de sus pueblos. "Hemos descubierto", cuenta Aziza -que llegó de Marruecos hace un año-, "un vertedero ilegal en el que había mucha basura, incluso una lavadora. Se lo hemos dicho a la concejal del Ayuntamiento para que limpie esa zona del pueblo y abra un punto limpio donde los vecinos puedan tirar estas cosas".

"Agenda 21 encierra componentes sentimentales y evocaciones del compromiso de todos en favor de un mundo libre de pobreza y respetuoso con su medio ambiente", explica Antonio Lucio, director de Promoción y Disciplina Ambiental de la Consejería de Medio Ambiente, responsable directo de este proyecto pionero en España.

En la cumbre de Río de Janeiro de 1992 nació ese compromiso. Fue allí donde se acuñó el término "desarrollo sostenible" como "aquel que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer sus propias necesidades". Entre los documentos aprobados por la cumbre de Río está el conocido como Agenda 21, un plan de acción para hacer realidad los compromisos allí adquiridos. Esta Agenda 21 recogía en 800 páginas, 40 capítulos y 3.000 recomendaciones, todos los problemas ambientales que afectan al planeta, tratando de dar soluciones reales a cada uno. Entre ellos se estableció la necesidad de trasladar los compromisos al ámbito local, en lo que se conoce como Agenda 21 Local y por extensión la Agenda 21 Escolar que es la que desde octubre los niños de la sierra oeste de la región llevan a cabo.

Pedro Calvo, consejero de Medio Ambiente, fue testigo ayer en San Martín de Valdeiglesias del compromiso de los pequeños con la naturaleza a través de la experiencia de sus abuelos. "Con Agenda 21 Escolar se pretende hacer posible que ese patrimonio cultural que atesoran nuestros mayores, que conocen muy bien en qué consiste vivir cerca de la naturaleza, se mantenga vivo. Son nuestros abuelos los que saben cómo hay que hacer para que los árboles vivan muchos años y a la vez rindan sombra y leña, y generen agua y retengan la tierra firme junto a la ribera".

Plan de acción

A lo largo de los meses que dura el proyecto, los niños que participan en la Agenda 21 Escolar realizan actividades en el aula y también visitan instalaciones, donde conocen más de cerca los problemas ambientales de su municipio. Con la ayuda de los mayores llevan a cabo estudios sobre el agua, los residuos, los transportes, el urbanismo, la obtención de energía, la industria y las actividades agrícolas y ganaderas. El programa, promovido por la Consejería de Medio Ambiente, tiene además como objetivo que los estudiantes realicen un diagnóstico que les lleve a proponer un plan de acción.Los chavales realizan sus trabajos con la ayuda de un monitor profesional en educación ambiental, un tutor del centro, material específico y, sobre todo, el asesoramiento del Consejo de Mayores, formado por personas de la tercera edad del propio municipio. Ayer, en San Martín de Valdeiglesias, Julio, uno de los integrantes de este Consejo de Mayores, hizo un llamamiento para defender los árboles: "El mismo paisaje con árboles es belleza y vida y el mismo sin árboles es muerte y desolación".La Agenda 21 Escolar permitirá introducir conceptos de sostenibilidad entre la población de estos municipios y sensibilizar a los escolares sobre los problemas ambientales.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_