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VISTO / OÍDO
Columna
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'Beau geste'

"...el centro suele ser un disfraz de la derecha que no se atreve a decir su nombre: así ha ocurrido comúnmente con los gobiernos europeos centristas de la posguerra, con el Zentrum austriaco y las democracias cristianas de Francia, Alemania Federal e Italia, denominadas centros y en realidad derechas, y a veces extremas, como en el caso del MRP francés, cuyos principales dirigentes llegaron a la sedición en apoyo de la extrema derecha del OAS...". Lo escribí en 1974 (Diccionario político, Planeta), no es raro que, casi treinta años después, lo cite a propósito del nuevo asalto a la palabra "centro" del aznarismo en su convención preelectoral. Es verdad que todo ha pasado ya antes: recordar el pasado es profetizar el futuro, y la repetición es una caricatura, según Marx (con perdón).

Como soy crítico teatral desde que nací no puedo evitar ver teatro en el beau geste de Aznar: el secreto, el salto a la tribuna en el momento inesperado: va a estar en la lista de aspirantes a concejal por el Ayuntamiento de Bilbao. Vaya susto. En solidaridad con los concejales vascos -de su partido y del socialdemócrata- amenazados y asesinados. Hay diferencias: aquellos concejales no van en coche blindado (uno salvó a Aznar del salvaje atentado), ni con larga escolta y vigilancia en las calles. Ni Aznar paseará Bilbao de puerta en puerta, a pecho descubierto, para pedir votos. Ni ocupará el puesto, porque al ser el último tiene la garantía de que no va a salir.

¿Cuántos saldrán? Puede que pocos. Añadirse a esta lista es gafarla, como el añadido de Ana a la lista por Madrid. Gafarla, digo, en un sentido material, porque hay gentuza que busca el gafe del PP, por el cual le suceden tantas cosas. No es nada sobrenatural: a Aznar no le quieren en Bilbao, probablemente por aquello a lo que alude él mismo en su discurso sorpresa: por su padre, falangista de Franco, y por su abuelo, don Manuel, navarro bilbaíno, que traicionó al PNV, en cuyo extremo -no censo- figuró, con una obra de teatro vasquista y los artículos bien escritos -como solía-: el "perillán", como le llamaba Indalecio Prieto (bilbaíno), en una "ficha" que le dedicó desde México. Ah, y por él.

(Beau geste: título universal de una novela de Wren, luego fue película. Aznar sería Gary Cooper. Perillán: persona pícara astuta).

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