Ruiz-Gallardón se opone a que las autonomías suban las pensiones bajas

El presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón, del PP, se opone a que las comunidades autónomas suban por su cuenta las pensiones no contributivas tal y como han decidido hacer este año la Junta de Andalucía, del PSOE, y el Gobierno de La Rioja, del PP, y como ha prometido el candidato socialista Rafael Simancas. Estas pensiones, las más bajas que existen, con una cuantía mensual de 259 euros, las perciben los minusválidos y jubilados que no cotizaron a la Seguridad Social o no alcanzaron el mínimo exigido de 15 años.

"Creo en la necesidad de la igualdad de pensiones para todos los españoles, que es uno de los logros absolutos que tenemos en nuestro Estado de derecho y en nuestra democracia, y creo que no se deberían de establecer discriminaciones en función de la comunidad autónoma a la que se pertenezca", explicó Ruiz-Gallardón. El presidente regional criticó las iniciativas de Andalucía y La Rioja con el argumento de que "no hay que romper el sistema nacional de pensiones que tiene que tener el carácter de igualdad para todos los ciudadanos".

Las pensiones no contributivas las fija el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. En 2002 sus perceptores cobraban 3.621 euros anuales, y para este año Trabajo prevé un incremento del 3,9%. Lo que han hecho Andalucía y La Rioja es aprobar ayudas extraordinarias que se suman a la subida prevista por Trabajo. Así, Andalucía concederá una paga única de 73,8 euros a los 109.000 beneficiarios de estas pensiones y La Rioja dará 100 euros a sus 2.257 beneficiarios.

Rentas mínimas

Ruiz-Gallardón considera que la mejor fórmula para atender a las personas más necesitadas de la región, entre ellas las 35.000 que perciben pensiones no contributivas, es la Ley de Rentas Mínimas. Dicha ley, en vigor desde hace un año, garantiza a los ciudadanos sin recursos una ayuda mensual mínima similar a la de la pensión no contributiva, pero que se incrementa si el beneficiario tiene familiares a su cargo.

El viceconsejero de Servicios Sociales, José María Alonso Seco, explica que la renta mínima madrileña "es un derecho de cualquier ciudadano necesitado, lo que tiene más valor que conceder una ayuda puntual como han decidido otras comunidades".

Pilar Morales, responsable de política social de CC OO, considera positivo "todo lo que favorezca a las personas que están en la miseria". "Nos parece bien que una comunidad decida mejorar las pensiones no contributivas, porque, aunque es verdad que la renta mínima es un avance porque reconoce un derecho a las personas sin recursos, son pocas las autonomías que han legislado sobre ella", añade.

Luis Fernández, de la Federación de Pensionistas de UGT, cree que la obligación moral del Gobierno regional es complementar las pensiones no contributivas "que están por debajo del umbral de la pobreza".