Zaplana reconoce que se entrevistó con Saur en cumplimiento de sus obligaciones

El ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, reconoció ayer durante una entrevista en el programa Hoy por hoy de la Cadena SER que se reunió en diversas ocasiones con dirigentes de la empresa Aguas de Valencia y que aceptó la invitación de uno de sus mayores accionistas, Saur, del Grupo Bouygues, para visitar su sede en París.

"En siete años y medio me he visto con infinidad de gente, tengo amigos en todas las partes. No estoy intermediando, ni interviniendo, ni tomando decisiones que no me corresponden", señaló Zaplana, que reconoció: "Durante mi etapa de presidente he visitado multitud de empresas, he ido a casi todas las entidades financieras que pueden existir en España, invitado a almuerzos y reuniones con sus altos dirigentes, y en esta ocasión, fui invitado por una de las empresas más importantes del mundo que tiene intereses en Valencia. Atendí su invitación como he atendido otras muchas, porque es casi mi obligación mantener esa relación fluida con la gente que tiene intereses en mi Comunidad. Todo lo demás me parece un desatino".

Joan Ignasi Pla, secretario general y candidato a la presidencia de la Generalitat por el PSPV, reiteró ayer que Zaplana tiene "mucho que explicar" sobre su participación en Aguas de Valencia y le invitó, "si es verdad que no tiene nada que ocultar", a comparecer con rapidez en las Cortes Valencianas y el Congreso de los Diputados, para someterse al control de la oposición. Pla sostiene que Zaplana tuvo un papel activo en la creación de un grupo mediático financiado por Aguas de Valencia cuando era presidente de la Generalitat, y que después continuó ya como ministro de Trabajo. "Zaplana tendrá que explicar en el Congreso sus gestiones siendo ya ministro para participar e intervenir en la toma de decisiones de una empresa privada", remarcó el dirigente socialista. El PP rechazó el pasado martes la petición del PSOE para que Zaplana compareciese en el Parlamento. Pla aseguró ayer que su partido reformulará su petición.

El secretario de Política Municipal del PSOE, Álvaro Cuesta, refrendó las declaraciones de Pla y fue incluso más allá. Cuesta se refirió a la descripción que el Código Penal hace del delito de tráfico de influencias y concluyó preguntándose con qué decisiones públicas favorecía Zaplana las inversiones en un grupo mediático. "El sendero de Zaplana sólo linda con el abismo", concluyó.

Por su parte, el grupo de Esquerra Unida en las Cortes Valencianas solicitó ayer la comparecenciai de Eduardo Zaplana en su calidad de senador territorial para que informe de "sus presuntas actuaciones para construir un grupo mediático afín al PP con la empresa Aguas de Valencia y las empresas con participación en la misma". El portavoz de EU, Joan Ribó, explicó que la ley de designación de senadores permite la presencia de Zaplana en las Cortes Valencianas para explicar su supuesta participación en la creación de un grupo de comunicación durante su etapa como presidente de la Generalitat. Ribó aludió a la promesa electoral del candidadato del PP Francisco Camps de hacer un Parlamento "a la inglesa" y le recordó que cuando una cuestión así se plantea en la citada Cámara "el tratamiento es muy rápido".

En este contexto, Francisco Camps cerró filas con el presidente regional del PP y ministro de Trabajo, Eduardo Zaplana, y arremetió contra su homólogo socialista Joan Ignasi Pla a quien acusó de colaborar en "un montaje y una patraña" inspirada por "dos directivos despedidos" de Aguas de Valencia.

Francisco Camps pidió a Pla que ofrezca explicaciones sobre supuestas irregularidades en la administración del PSPV y le instó a dimitir de su cargo de diputado en el Congreso para dedicarse plenamente a la precampaña electoral.