Bush y Blair están dispuestos a dar más tiempo a las inspecciones en Irak

El primer ministro británico, Tony Blair, y el portavoz de la Casa Blanca coincidieron ayer en la importancia de dar a los inspectores de la ONU el tiempo necesario para dictaminar si Irak está violando las resoluciones de Naciones Unidas en materia de desarme. "Es importante que los inspectores de armamento hagan su trabajo y dispongan del tiempo necesario para hacerlo", aseguró Ari Fleischer, portavoz de la Casa Blanca. En el mismo sentido se expresó Blair, quien dijo que no se puede imponer un "calendario arbitrario" al trabajo de los inspectores. Después de dos meses de trabajo sin encontrar pruebas de armas de destrucción masiva en Irak, Londres y Washington dieron así, ayer, las primeras señales de que el horizonte de la guerra no se dibuja tan nítidamente después del 27 de enero, fecha en que los inspectores deben rendir cuentas de su trabajo ante el Consejo de Seguridad. Respondían también a las peticiones del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), que ayer solicitó entre seis meses y un año para completar su trabajo en Irak. Pero si hay que actuar para desarmar Irak, advirtió Blair, se hará con o sin la ONU. La ministra francesa de Defensa, Michèle Alliot-Marie, aseguró, sin embargo, que Francia no enviará soldados sin una decisión del Consejo de Seguridad.