Ana Botella: "Me comprometo a hacer de Madrid la mejor ciudad del mundo"

"Me comprometo a trabajar para hacer de Madrid la mejor ciudad del mundo", proclamó ayer Ana Botella, esposa del presidente del Gobierno, al anunciar su candidatura como número tres en la lista de Alberto Ruiz-Gallardón al Ayuntamiento de Madrid. Botella aseguró que quiere dedicarse a la política porque mantiene "intactas" sus "ilusiones" gracias al ejemplo que le ha dado su marido. "Creo que la política es una actividad noble y digna (...), y eso se lo debo en gran parte a la persona con la que he compartido mi vida desde hace 28 años, que ha actuado durante toda su vida pública con aciertos y errores, pero siempre por convicciones y teniendo como objetivo de su actividad política el interés común", declaró.

En un acto multitudinario celebrado en un hotel madrileño, la esposa de José María Aznar aseveró ayer que "por ayudar a mejorar nuestra sociedad merece la pena estar en política"; que acepta la oferta de Alberto Ruiz-Gallardón para integrarse, como número tres, en la lista del PP para el Ayuntamiento de Madrid, y que quiere dedicarse a "las políticas de carácter social porque son la expresión más ajustada de una vocación de servicio a los demás" que, según dijo, es para ella "inseparable de la política".

Hizo un discurso a favor de la igualdad de la mujer, de la "plena participación del hombre en la educación de los hijos y en los trabajos de casa". El telón de fondo, con el azul del PP, estaba compuesto por una foto de una mujer con una niña pequeña. Con esa imagen y el eslógan Más bienestar, defendió que "estar casado no debe de ser una facilidad para que un hombre encuentre trabajo, pero tampoco una dificultad para que lo encuentre una mujer"; criticó la "violencia contra las mujeres como un ataque al conjunto de la sociedad", y ofreció su compromiso político no sólo con las mujeres sino también con los inmigrantes, los discapacitados y los mayores.

Ana Botella tuvo dos teloneros de peso que, además, son amigos personales suyos. Arrancó el acto el presidente del PP madrileño y coordinador de la campaña electoral para el 25 de mayo, Pío García Escudero, y lo cerró la candidata popular a la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. García Escudero le dijo que "en política, tal como están los tiempos, hay que ser muy valiente para lanzarse al ruedo". Fiel a su afición taurina, le advirtió que "entra por la puerta grande", que "le espera un miura", pero pronosticó que hará una "faena" para salir también por la "puerta grande". Aguirre le anunció que "va a ser muy duro, más de lo que piensa" pero que "la política, especialmente la municipal, es muy gratificante".

A la presentación de Botella como candidata no acudió su marido ni ninguno de sus tres hijos. A la salida, una periodista se abrió paso entre el grupo de acompañantes, escoltas y fotógrafos que la rodeaban para preguntarle qué opinaba su familia de este salto a la política. "Los dos mayores ya no están en casa, pero al pequeño le parece muy bien". ¿Y a su marido? Con una sonrisa, continuó su camino flanqueada, entre otros, por su futuro jefe, Alberto Ruiz-Gallardón, y por el secretario general del PP, Javier Arenas, el único ministro que ayer acudió a la presentación en sociedad de la candidata.

El anuncio de la mujer del presidente no sólo superó en parafernalia política y expectación a lo previsible en una candidata a concejal de Asuntos Sociales sino al imaginable en el caso de una candidata a alcaldesa. Su discurso también introdujo elementos que trascienden la preocupación por la familia y los menos favorecidos. Así, anunció que quiere hacer de Madrid "la mejor ciudad del mundo", y "emplazó" a todos los presentes a trabajar "con el proyecto del Partido Popular para la Comunidad de Madrid y para el Ayuntamiento".

Como número tres en el Ayuntamiento, Botella podría llegar a ser alcaldesa si, después de una victoria del PP, tanto Ruiz-Gallardón como su número dos dejaran sus cargos municipales. Así lo prevé el artículo 198 de la Ley de Bases de Régimen Local. Esta posibilidad es, en opinión del presidente del PP madrileño y coordinador de campaña, "sencillamente impensable". García Escudero respondió ayer a este diario que "si Ruiz-Gallardón concurre a estas elecciones para ser alcalde, es para ser alcalde y no para saltar a ningún otro sitio". Pensar en "esa posibilidad sería, como mínimo, poco consecuente". Por ello, zanjó: "No va a ser así".

García Escudero no tiene aún decidido si concurrirá en la lista de Esperanza Aguirre a la Comunidad de Madrid, como en anteriores ocasiones, o aceptará la invitación de Ruiz-Gallardón para ser su número dos para la alcaldía. De momento, cree que el "número dos natural de Gallardón es Manuel Cobo", consejero de Presidencia de la Comunidad. Además, destaca que el Gobierno pretende sacar adelante la ley de Grandes Ciudades antes del 25-M y que esa norma marcará una nueva forma de estructurar ayuntamientos como el de Madrid.