La larga marcha de Linux
Linux, el sistema operativo de fuente abierta creado por una comunidad de hackers, continúa su marcha hacia adelante. A las razones conocidas que contribuyen al éxito de este sistema operativo (bajo costo, confiabilidad), ahora hay que añadir el hecho de que se ha convertido en el arma a la cual han vuelto a acudir los adversarios que Microsoft hace a medida que trata de entrar en nuevos mercados.
Luego de haber logrado formar su propio nicho en el mundo de los servidores (una encuesta del grupo británico Butler prevé que podría sobrepasar a los servidores Unix, y de esta manera convertirse en el primer sistema operativo para servidores en 2009), el OS que usa a un pingüino como emblema comienza a penetrar el mercado de las computadoras personales. Windows controla cerca del 95% del mercado, pero Linux se aproxima al 2% de los sistemas vendidos (la encuesta no tiene en cuenta los sistemas descargados gratuitamente que ocupan un lugar importante) y debería ocupar el segundo lugar a partir del próximo año.
Tras haber logrado su propio nicho en el mundo de los servidores, el sistema operativo del pingüino empieza a penetrar en el mercado de los ordenadores pesonales
El gran debate sobre las debilidades de Linux frente a Windows se centra en el coste de su mantenimiento técnico
El éxito se debe a la entrada en circulación de diferentes versiones del OS, como Lindows, especialmente concebida para consumidores comunes y corrientes. Otra contribución importante ha sido la puesta en venta por parte de la cadena de almacenes Wal-Mart de computadoras equipadas con Linux por sólo 199 dólares. Varias compañías han lanzado aplicaciones de uso fácil. Este es el caso de Ximian, del mexicano Miguel de Icaza, y su programa Evolution, que realiza tareas parecidas a las de Outlook. La suite Crossover Office de CodeWeavers, por su parte, permite que diferentes aplicaciones de Windows funcionen en una máquina equipada con Linux.
Una encuesta realizada por ZDnet confirma lo que se sabe de las principales motivaciones de quienes utilizan Linux para servidores. Desde el punto de vista técnico, está la estabilidad, y desde el financiero está el bajo precio de compra del producto. El costo total se presta, por otro lado, para discusiones acaloradas.
A principios de diciembre, la compañía de investigaciones IDC publicó un estudio -financiado por Microsoft- según el cual en un lapso de cinco años, Windows es casi siempre menos costoso que Linux. Vale la pena notar que una memoria interna de la empresa de Bill Gates, publicado en el sitio OpenSource.org había sacado a relucir una encuesta realizada entre julio y septiembre de 2002 según la cual "en términos generales los encuestados sentían que la razón más importante para apoyar el software de fuente abierta era que ofrecía un bajo costo total de propiedad".
La maniobra es clara. Pero, de hecho, el costo de la mano de obra necesaria para el mantenimiento de las máquinas equipadas con Linux puede ser elevado pues los técnicos competentes son más difíciles de encontrar y deben tener un nivel de conocimiento más elevado.
A la larga, el hecho más relevante del año 2002 podría ser que un gran número de competidores de Microsoft que luchan cada uno por su propia marca parecen haber encontrado en Linux una alternativa común. En febrero Sun Microsystems, que había mantenido su distancia con respecto a soluciones que compitieran con su plataforma Solaris, lanzó servidores equipados con Linux. Asimismo, en diciembre, Sony y Matsushita, las dos gigantes japonesas de la electrónica, anunciaron su decisión de desarrollar conjuntamente un sistema operativo basado en Linux para la puesta en redes de sus aparatos caseros. Se trata de una consecuencia natural de la expansión en todas las direcciones de Microsoft, desde los juegos electrónicos hasta la telefonía celular. El elemento nuevo es que estas empresas ocupan una posición dominante en sus respectivos mercados, donde gozan de la confianza de sus usuarios, y disponen de reservas financieras sólidas. Es muy posible que sean más difíciles de derrocar que Apple o Netscape.
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